Cap 1

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Es el penúltimo año de secundaria, Saery se pregunta qué será de ella este semestre mientras se dirige a su Instituto, estuvo todas las vacaciones conversando con sus compañeras sobre lo extraño que era tomar supresores desde ahora, e intentar calcular los ciclos, todas sintiéndose unas omegas adultas, pero ella parece no alcanzar la madurez aún y no lo logra entender, su cuerpo está formado, su estatura no es la de una niña, diablos hasta esa pequeña Noruna está feliz con los resultados de sus exámenes, pero al no haber entrado en calor ella no ha podido ser parte de todo este cambio hormonal que marca tanto la adolescencia "cuando encuentres al Alfa correcto tu omega despertará" eso dicen los adultos "no desesperes, no es un asunto de apresurar" claro como ellos lo saben todo, piensa algo molesta, pero diablos las chicas de la escuela ya hablan sandeces, los rumores se extienden y dicen que no servirá de nada, los betas casi están extintos por que difícilmente pueden procrear, especialmente las Beta hembra, ya que los machos siempre prefieren a una buena Omega y no sólo eso, también son contratados en trabajos tediosos y lentos, nadie quiere un jefe Beta, es casi usado como un insulto, solo son engranajes del sistema, los niños pueden ser crueles con sus palabras, y tontos al creer todo esto, pero la incertidumbre logra inundar a la chica mientras abre su casillero y saca una de sus tantas botellas de perfume "las Omega huelen dulce para los alfa..." Susurra para sí, ella jamás ha tenido un aroma particular por eso siempre los usa y es muy cuidadosa de mantener una botella del mismo a mano, no quiere que la noten, quiere, encajar...

Respira hondo y comienza a caminar hacia el lugar donde disponen las listas de cada curso, "tranquila, es un nuevo año escolar, quizá el tema de la madurez sea moda vieja y volvamos a dividirnos entre artistas y lógicos como cuando hicimos el experimento del cohete, este año puede ser mejor"  Al llegar al lugar ve caras conocidas, se acerca a los murales y comienza a buscar su nombre, se tropieza en varios nuevos agendados a lo largo de los cursos, siendo grupos pequeños los nombres nuevos suelen ser notorios y siempre es bueno saber cuantos o donde estarán, hasta que da con el de su mejor amiga "Amy sigue en la misma letra, espero encontrar..." "¡SAERY!" una mano en su hombro la hace saltar y un pequeño chillido se escapa de su garganta, gira hacia la persona algo atontada y perdiendo toda la concentración, "A-Amy, me asustaste..." Amy, su amiga de toda la vida estaba esperándola como siempre "lo siento, sé que eres asustadiza, pero es tan divertido escuchar ese chillido" su amiga ríe, "¡estamos en el mismo curso! ¿Ya viste?" la chica esboza una enorme sonrisa esperando su respuesta, es difícil verla así de alegre, tiende a ser meticulosa y muy retraída, seria y algunas personas hasta la describen como complicada, pero es el primer día y nadie puede contener la emoción de volver a ver a sus amigos "pues lo habría visto si no me hubieses asustado" contesta mientras la mira con gracioso desdén a lo que su amiga suelta una pequeña carcajada "perdón, perdón, vamos al aula de una vez, dicen que hay muchos nuevos este año, con esto de las especializaciones" especializaciones, claro olvidé eso... En nuestro instituto tenemos un último año para encaminarnos a nuestro campo de preferencia, por lo que hay diversos programas de filtro y muchos jóvenes acaban viniendo para tener una base sólida al entrar a la universidad, es uno de los pocos que cuenta con este programa, aunque ha sido duramente criticado por los conservadores, por el hecho de que se establezca en una institución mixta teniendo en cuenta que al menos en el caso de las Omega es mas común que aprendan algún curso de labores domésticas, ya que se toma por sentado que serán esposas y madres. Ambas se dirigen a su aula y la forma de ser de Amy en el ambiente escolar comienza a mostrarse, es un poco más alta que Saery y desde pequeña ha sido protectora con ella, la considera una pequeña princesa, sentimiento que sólo incrementó cuando se dio cuenta de que ya era una Omega mientras, su amiga, meses mayor aún no tenía ningún síntoma de madurez, "vamos, quiero conseguir un asiento en la ventana para ti, así si quiero ver por la ventana solo cambiamos!" dice tomando a la más baja de la muñeca y la jalándola hacia el aula "¿¡por qué no te quedas con ese puesto tu!?" pregunta Saery al ser arrastrada velozmente "¿Que dices? ¡si te siento al pasillo te van a empujar o pisar! O quién sabe! No, no, tú a la ventana!" responde con una seguridad digna sólo de ella, al fin y al cabo ella igualmente quería el puesto de la ventana, era lo mejor para distraerse del día a día, y siempre era agradable ser protegida por Amy, no era nada nuevo, siempre fue la más pequeña de su curso, mamá era muy pequeña también, una omega de tomo y lomo, alegre, dulce, cocina delicioso y de ella aprendió toda su "etiqueta", siempre le inculcó que siendo ella misma sería la mejor Omega del mundo, cosa que preocupaba un poco a Saery, ella no quería simplemente ser eso, o lo otro, ella quería poder decidir aunque sabía que era imposible en esta sociedad, las omega siempre han sido miradas como una clase menor, ayudadas por el gobierno si están solas, apoyadas y cuidadas, lo que no sería malo si no fuesen también miradas como individuos menos capaces y eso es lo mismo que le molesta a Amy, quien desde el primer día en que se lo permitieron comenzó a tomar supresores para que sus hormonas no influyeran en su vida diaria, aun cuando significa un posible problema cuando sea adulta, ella no quería definirse sólo por eso, y al verla tan concentrada Saery a veces toma en cuenta que sus problemas son mínimos, no necesita apurar nada... "¿y qué si soy una beta?" Se repite intentando auto convencerse, "al menos no me tendré que subyugar ante un alfa que se embelese de algo que no forma parte de mi personalidad".

She WolfDonde viven las historias. Descúbrelo ahora