prólogo

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Narrador omnisciente

Beyza no era la clase se omega que podía darse el lujo de estar al aire libre y feliz, él solo permanecía en las tortuosas habitaciones silenciosas de su mansión, si bien tenía de todo al ser el hijo de la hermana alfa del soberano de Crimea y la hija omega de un rico mercader, tenía los lujos de un príncipe más no el titulo como tal por su casta, el bello omega de ojos grises y cabello negro como el mar profundo heredado por su madre alfa deseaba solo una cosa, ser feliz. Su madre/padre hacía que él, sus hermanas y su madre omega vivieran ocultos

Fue educado nulamente ya que varios de sus profesores iban con la intención de tratar de abusar de él o pedir su mano con su madre/padre, ella siempre negó las ofertas matrimoniales para su hijo de 11 años pero cuando él cumplió 12, las cosas se complicaron

-mamá - temeroso y sollozando le pregunta a su madre omega -¿por qué madre está tan molesta - delicadamente, su mamá pasa su mano por su cabeza y con una sonrisa delicada le contestó
-ella está así porque personas malas quieren hacerte cosas malas, hijo, pero ella lo va a impedir - su madre alfa estaba revisando unos documentos que con cada estrofa que amargamente leía, su aura se volvía mas inestable. Triste, enojada, impotente, así se sentía ella
-Gülnus, ven aquí - Llamó a su esposa que de inmediato acudió a su llamado
-¿qué sucede, Alev - su esposa la miró con sus ojos dorados de alfa llenos de preocupación y tristeza
-tenemos que hacerlo, mi amor -la omega rubia comprendió a qué se refería y se abalanzó hacía su cachorro
-¡NO! - gritó -¡MIS HIJOS NO! - Alev se había metido con un alfa persa al que después descubrió que era el líder. Había pedido prestadas fuertes cantidades de oro para pagar muchas cosas en su mansión que según su esposa omega, eran innecesarias y poco útiles, seda china para las cortinas y vestidos, joyas, mantenimiento de la gran casa, sueldos bastante generosos para la servidumbre entre otros. Su hermano dejó de darle su sueldo correspondiente cuando Gülnus dio a luz a su tercer y última hija, Hümasha. Antes de Beyza, tuvieron trillizas, Rabia, Handan y Hümasha. Tanto Handan como Rabia eran omegas pero Hümasha fue alfa por lo que Ahmet Khan, hermano de Alev Khan se sintiera amenazado por lo que las dejó en la miseria 5 años después de que naciera Beyza, eso no impidió que él fuera criado casi como un príncipe, vestía y comía decentemente y dormia en una buena cama. Todas esas comodidades llevaron a sus madres a la quiebra total.

De pronto, entre el silencio y los sollozos de ambos omegas, alguien tocó frenéticamente la puerta de roble que estaba situada en el despacho de la alfa, estremeciendo a las mujeres y al omega en su interior, de alguna manera habían entrado a la mansión
-su excelencia, denos a sus hijo y saldaremos todas sus deudad- habló un alfa al otro extremo de la puerta, ellas no eran tontas, sabían que matarían a sus hijos o les obligarian a parir hasta que muera en un parto , Así es el destino de las y los omegas que no son de familias nobles o de la realeza y aunque lo fueran como en su caso, sin protección ni dinero no eran nada, solo gente con título .
Entraron por la fuerza, tomaron al niño y mataron a su hermana Hümasha, Rabia y Handan fueron violadas ahí mismo ante todos los espectadores, las paredes estaban manchadas con la sangre de algunas criadas que trataron de ayudar a sus amas pero solo consiguieron ser violadas y golpeada.
Ahora él está solo en una tienda, atado y para su buena suerte aún virgen.
Lo que Beyza no imagina es que su vida cambiaria para siempre por culpa de sus madres

BeyzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora