Capitulo 2

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Por fin, ya estaba en mi nuevo hogar, debo admitir que al inicio la idea no me gusto para nada, pero ahora que lo veo de otra forma, podré hacer lo que se me de la gana sin que mis padres opinen.

Ya eran cerca de las 6 p.m. y tome un baño para relajarme, ya que había acomodado todas mis pertenencias en el departamento y había sido agotador.

Me arregle y a las 8 en punto estaba saliendo a conocer el lugar.

Camine unas cuantas cuadras y me encontre con una discoteca. No dude en entrar.

Tenía un secreto que no iba a ocultar mas, me encantaba bailar, era mi pasión.

Lo primero que vi al entrar fue toda la gente en la pista haciendo sus mejores pasos, sin embargo, decidí primero ir por un trago.

Me acerque a la barra y el bartender era un chico muy apuesto, se me quedo mirando por unos segundos y despues hablo.

-Buenas Noches hermosa, ¿que te gustaría ordenar?-pregunto sonriente mirando directamente mis ojos, lo que hiso que mirara hacía abajo.

-Una cerveza por favor- conteste sin verlo, la verdad es que la forma en que me había mirado me puso demasiado nerviosa.

-En seguida hermosura-dijo y me guiño el ojo para después ir por mi pedido.

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Habia pasado al rededor de una hora desde que había llegado y no me había animado a bailar. No se como pude pretender que lo timida se me quitaría de un momento a otro. Estaba dispuesta a regresar a mi departamento, esto no funcionaria. Solo había tomado 3 cervezas y ya me sentía un poco mareada, no estaba acostumbrada a tomar. Tome mi bolso le page al bartender y me levante de mi asiento caminando hacia la salida.

Entonces choque con alguien tambaleandome un poco.

-Lo siento- pronunció aquel hombre sujetandome para no caer.

-Oh no hay problema, fue mi culpa-dije mientras daba un paso hacía atrás para poder verlo.

Me perdí, si esas son las palabras. Justo cuando hice contacto con sus ojos color esmeralda, me habia perdido en ellos. Quede anonada, sus ojos eran hermosos.

Al notar que lo miraba sonrió, no pude evitar sonrojarme, su sonrisa era hermosa, era una sonrisa perfecta.-Lo siento- dije de nuevo- tengo que irme- dije mientras daba un paso.

-Espera- me tomo del brazo- ¿tan temprano decides irte?-preguntó, como es que puede hablar con tanta confianza si acabamos de conocernos?, admito que estoy muy nerviosa, pero eso se debe a que nunca eh tenido contacto con ningun hombre que no sea familiar mio. Lo se doy verguenza ya que tengo 22 años.

-U-um supongo- dije nerviosa.

-¿que te parece si te quedas, y me haces compañía esta noche?-dijo sonriente, pero lo que me causaba aun mas nervios era su mirada, era tan... oscura-

-Y-yo umm, no lo se-conteste insegura después de todo yo no lo conocía y el parecía tener tanta confianza hablandome.

Me miro por unos segundos y después abrio sus labios para hablar.-Entonces debo tomar eso como un si- dijo mientras me ofrecia su mano, para regresar a la barra.

Que mas da, tenía que dejar de ser timida algun dia, y que mejor con un hombre tan guapo como el, aunque debo admitir que no me inspiraba mucha confianza.

Sin embargo no me había puesto este vestido negro provocativo para nada. Hay que aprovechar.

Acepte su mano dedicandole una sonrisa y fuimos directo a la barra.

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