Lipstick [OS NamJin]

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El centro comercial poseía su vibra común, siempre activo y lleno de personas que caminaban por sus pasillos; unos lidiando niños, otros iban con amigos, en pareja o simplemente solos. Dentro de ese último grupo se encontraba NamJoon, quien, con su aura sencilla pero atractiva andaba esquivando los tumultos de gente con un solo objetivo en mente: llegar a la tienda de Urban Decay.

Era la primera vez que compraría maquillaje y no tenía ni idea de la manera de escoger lo que mejor le iría al rostro de su novia, JiSoo. De hecho, era por ella que hacía tal travesía en el centro comercial, más al tratarse del primer aniversario de noviazgo.

Meses antes la fémina se la pasó mencionando las nuevas colecciones de labiales de Urban Decay. Hablaba sobre la textura, los colores, los empaques y su inmenso deseo de obtener así fuese uno solo. Ante esto, Nam decidió sorprenderla con tal anhelo. Y ahí estaba, buscando el local de la marca.

—¿Disculpe? —el Kim se dirigió a uno de los guardias de seguridad—. ¿Podría decirme dónde queda la tienda de Urban Decay?

—Aquí no hay tienda de eso. Creo que te refieres a Morphe. Ese es el último local siguiendo derecho.

Joon no entendió nada, pero igualmente agradeció al trabajador para luego seguir sus indicaciones y probar suerte. Él desconocía ese mundo de la belleza, los artículos para la piel y todo eso; razón por la que solo obedeció y guió sus pasos en orden de las instrucciones recibidas.

El moreno no demoró en llegar a una amplia e inmensa tienda que por algún motivo siempre ignoró. Con letras resplandecientes en la entrada anunciando el nombre, se exhibía como local de cosméticos: Morphe.

Un mundo de paletas de sombras, labiales, bases de toda consistencia, innumerables brochas y demás recibieron y sorprendieron a Nam, quien en un estado atónito no daba cabida a que enserio pudiese existir múltiples versiones de tan comunes productos, aunque bueno, él era hombre y no es que se haya interesado mucho por ello. Es por eso que, ignorando las cantidades de maquillaje, se limitó a buscar entre los estantes su objetivo, a veces confundiéndose con los diversos cofres, espejos y repisas que aparecían en su campo de visión.

En medio de la búsqueda el Kim no tocaba nada, ya que temía dejar caer alguno de los frascos o cajas, y así terminar saliendo con una deuda en lugar del regalo de su novia. Él era consciente de que solía romper las cosas aún cuando las trataba con cuidado; no obstante, este detalle limitante le estresó debido a que no podía examinar muy bien los productos.

¿Lo peor del asunto?

¡Había como mil marcas en aquel local! Es decir, además de todo tenía que escarbar entre los nombres de Kylie Jenner y Jeffree Star hasta los mostradores de MAC y Anastasia Beverly Hills. Un asunto que sembró su desconcierto ante la posibilidad de llevarse el resto del día en ese sitio.

—¿Puedo ayudarlo? —un joven se le había acercado a Nam, quien de inmediato volteó.

El joven que recién apareció lucía una apariencia y pose pulcras, vestido con un pantalón y camisa de botón, ambos de color negro; sus cabellos lisos bien peinados hacia atrás y, en su rostro, una expresión cordial. RM obvió que se trataba de uno de los empleados del almacén, quien a su vez le pareció que era muy guapo. Era un atractivo peculiar cuyo interés tuvo que disipar apenas se le cruzó por la mente.

Algo apenado por no haber acudido por ayuda antes, NamJoon explicó:

—Estoy buscando un labial de la marca Urban Decay para mi novia, pero no soy muy bueno buscando.

—Perfecto. Yo te colaboro con eso. Mi nombre es Kim SeokJin y seré tu asesor.

Acto seguido, el presentado como SeokJin hizo un ademán para que le siguiera y el moreno obedeció, caminando tras los elegantes pasos del contrario, el cual no demoró mucho andando pues la zona de Urban Decay no estaba tan lejos de donde ellos se encontraban.