Yo también te Quiero

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JungKook Pov

...- Yuwhang, ¿Quieres quedarte en el piano? Yo iré a limpiar arriba.  - dije levantándome del banco después de haber tocado con él por unas dos horas.

- Pero si limpiamos mi habitación esta mañana. - se quejó haciendo un puchero sin levantarse de su lugar.

- No limpiaré tu habitación, serán las demás.

- ¿Qué? Pero si papá te dijo que podías dejarlas así. - dijo mientras se levantaba para caminar hacia mí.

- Sí, Pero no me prohibió que lo hiciera. - respondí caminando hacia las escaleras. - Si quieres puedes venir, me dirás qué puedo tocar y qué no, ¿Está bien?

- Está bien, hyung. - dijo sujetando mi mano mientras subíamos.

Le miré sonriente, cómo cada vez que me llamó "Hyung" esos días. Llevaba una semana o dos trabajando en casa de Yuwhang, la verdad es que no llevaba la cuenta, pero lo que sí puedo asegurar que disfrutaba enormemente cada segundo que pasaba con él, es un niño encantador, con mucho amor para entregar y dispuesto a recibir mucho también.

La rutina se hizo normal demasiado rápido, a veces ambos pasaban por mí a la universidad, cuando TaeHyung tenía tiempo para almorzar en casa, y otras veces yo pasaba por Yuwhang al complejo deportivo después de mis clases, pues TaeHyung estaba demasiado ocupado. Al llegar a casa era sencillo, preparar el almuerzo, comer, todos juntos o solo Yuwhang y yo, cuando TaeHyung estaba en casa se marchaba después de eso y luego Yuwhang y yo teníamos la casa sólo para nosotros, jugar en el jardín, correr por toda la casa, tocar el piano, hacer barquitos de papel y jugar con ellos en el riachuelo que está a unos pocos metros, mirar las nubes para encontrar formas en ellas... Todo eso y cualquier juego que se nos ocurriera era perfecto para pasar el tiempo hasta la hora de preparar la cena, Yuwhang siempre se sentaba en la isla a ver lo que hacía y a veces me ayudaba a sacar la cáscara del banano y cosas como esas. Cuando la cena estaba lista nos cerciorábamos de que todo estuviera en orden, Yuwhang a la ducha, luego Yo y esperar hasta que TaeHyung llegara, aunque era común que a veces no llegara a cenar.  

Y en comparación con los primeros días, TaeHyung ya no era tan aterrador, supongo que me había acostumbrado a su mirada vidriosa y a su semblante intimidante, aunque a decir verdad, creo que él había moderado un poco su actitud, ya no era tan distante, por el contrario ahora era más común verlo sonreír y a veces también se unía a nosotros en los juegos.

Yo había identificado sus dos momentos y también había identificado en cuál acercarme y en cuál debía ser prudente, si no decía nada al llegar y se encerraba en su estudio, ¡Peligro! No acercarse, la comida tenía que estar perfecta, Yuwhang debía ser obediente y nada de ruido, pero si por el contrario llegaba con semblante deslumbrante, preguntando por lo que sería la cena y por cómo estuvo el día, significaba que tendríamos un resto de tarde agradable o incluso divertida.

- ¿La habitación de papá? - preguntó señalando el final del pasillo

En el segundo piso hay un pequeño Living, que es adonde nos llevan las escaleras, el balcón es bastante amplio y tiene una linda vista, desde aquí se alcanza a ver algunas villas cercanas y muy a lo lejos está Seúl, que es mucho más visible en la noche por las luces. Hay una pequeña mesa con cuatro sillas y también hay plantas con flores, las cuales me propuse recuperar hace unos días, pues al principio casi no le prestaba atención a otro lugar de este piso que no fuera la habitación de Yuwhang. El pasillo está opuesto al balcón, de un lado están tres habitaciones y una de frente que es donde termina y del otro lado el ventanal, que en realidad es toda una pared de cristal que da vista a la parte delantera de la villa.

Llegaste TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora