Obstinado.

Capitulo 2.

No lo entendia, nisiquiera el mismo sabia porque acepto ir a la fiesta. Resulta que el ultimo mensaje que la mexicana le habia enviado era para invitarlo a una fiesta queria negarse, pero de todos formas termino yendo, el estaba con su trillizo mayor y menor encontradose el en el medio de los dos, Panamá decidió no ir ya que se encontraba enfermo.

Cuando le aviso a España de su salida enseguida sus hermanos se metieron para ir también, le molesto aquello si y mucho pero lo disimulo manteniendo su expresion neutra. El no queria estar con sus hermanos, le extresaba demasiado, si fuera el mismo chico de antes estaría con una sonrisa de oreja a oreja contento de que ellos lo acompañen, claro, para despues ser olvidado y dejado de lado por ambos importandoles como se sentia.

Mas de una ves lo dejaron abandonado en las fiestas sin avisarle, la excusa que le daban cada ves que lo dejaban no tenian sentido, muy internamente en su ser comenzo a odiarlos.

-- ¡Vamos alli Vene! -- Señalo el trillizo menor al ver un pikachu gigante inflable.

El Ecuatoriano agarro del brazo al venezolano para llevarselo corriendo a donde se encontraba el inflable gigante, olvidando al Colombiano otra vez, Colombia suspira resignado ya estaba acostumbrado a que lo dejaran solo, no hiba a hacer un escandalo por ello, le parecia una ridiculez. Decidio caminar a ver si encontraba a algun conocido o amigo fingió una buena cara y saludaba amigablemente, odio hacer eso.

Se encontró con muchos conocidos hasta con Italia el ex-esposo de España, por alguna razón Colombia se sentia mas cómodo estando con el Italiano. Le hacia sentir que no estaba solo, aunque de su hijo no se puede decir lo mismo, no era muy fanático de hablar con el argentino, le incomodaba estar con el.

¿Sera acaso por las burlas crueles que el le hacia con otros paises?, nah, el no piensa que sea por eso pero aun asi no podia evitar sentirse de esa manera con el Argentino, no lo malinterpreten el no lo odiaba ni nada solo le incomodaba, pasaron unos minutos y termina por despedirse del Italiano y su hijo, decidido a encontrar a sus hermanos regreso con pereza al lugar donde estaba antes tratando de encontrar el enorme pikachu, pero no habia nada, mira a los alrededores pidiendo permiso a las personas para poder pasar "Parece que lo cambiaron de lugar, seguro siguieron a ese globo gigante" penso al no encontrar rastro alguno de sus gemelos, suspiro agotado.

Agarra sus cabellos fuertemente y lo aplasta, ¿está enojado? Si, digamos que lo esta pero era algo que podía superar en todo la maldita noche no encontro ni un rastro de la Mexicana ¡se supone que lo invito!, pero no la encontraba en ningun lado, agotado tanto mentalmente como física decide irse a un rincón de la gran fiesta y pensar con mas claridad, la musica lo estaba matando ya sentia en sus oídos un zumbido molesto. Pasando entre las personas y saludando a quien conocia. Estando ya lejos de todos comienza a mirar a sus alrededores aburrido, era notable que estaba buscando a alguien pero todo fue en vano, vuelva a suspira por milésima ves en la noche, se siente agotado, un quejido que se quedo en su garganta agarrándose el estomago fuertemente.

El no habia bebido ni comido nada en todo la noche, pero un dolor en su barriga lo hizo encogerse, temblando y casi sollosando se acuesta mas hacia la pared y se recarga completamente, pequeños gemidos de dolor salían de su boca y para su suerte estaba comenzando a sentir ese vacio en su pecho, se sentia ahogado.

Estaba ahogandode en su propia miseria y dolor, ¿estaba teniendo un puto ataque? ¿porque?, hace unos segundos estaba bien y ahora, ahora estaba sufriendo un dolor del infierno y un vacio inexplicable. Antes de el pudiera saber que pasaba a su alrededor escucho que lo llamaban, no falto decir que no eran sus hermanos.

-- ¿¡Colombia!?, ¡Oh Dios mio! -- grito una voz femenina que no alcanzo a distinguir entre la gente.

Queria cerrar sus ojos y jamás abrirlos pero la misma muchacha lo agarro de los hombros y no solto, ¿que mierda le estaba pasando? El dolor en su estomago era insoportable como si constantemente lo estuvieran golpeando en el mismo lugar una y otra y otra vez, apenas y pudo ver el cabellos de la chica rojo, blanco y verde, oh era México.

"Oh, Triplemalparida al fin decides aparecer" penso el Colombiano sonriendo. Pero ella no estaba sola.