El fuerte y retumbante sonido de las sirenas de los patrullas se escuchaba cada vez más cerca de su coche, llenando las paredes y la noche oscura que los rodeaba del color rojo y azul de estas, mismos colores que molestaban la visión del conductor al querer escapar y distraerlos para poder huir y salir con vida. Todos sus compañeros habían sido abatidos a excepción de ellos dos, y a pesar de querer salvarlos para escapar todos juntos e irse lejos de la ciudad, no podían arriesgarse a tal peligro y dejar que la policía ganara. Si hubiera sido así, los habrían pillado y seguramente, condenados a perpetua o fusilamiento por cada uno de sus crímenes cometidos al largo de esos meses.
El castaño oscuro fruncía el ceño, haciendo una mueca de desagrado con sus labios mientras sus manos apretaban con fuerza el volante, girando de forma brusca en cada curva que se cruzaba en su camino, casi llegando a volcar el coche y perder el control de este. Las sirenas ya empezaban a volverlo loco, queriendo deshacerse de ellas costara lo que costara antes de dispararles sin pensárselo dos veces. Quitando de eso, había otro sonido más que retumbaba por su cabeza, y eran los quejidos y gemidos de dolor de su acompañante, quien tomaba con fuerza su brazo izquierzo y hacía lo posible para aguantar el dolor de los diversos roces de bala que tenía en este.
Bufó con fuerza, frotando sus ojos con una sola mano al ver que empezaba a notarse más cansado de lo normal y como los patrullas continuaban a pocos metros de ellos. Necesitaba armar un plan lo antes posible para salir de allí. No podía arriesgarse a permanecer más tiempo aguantando esa persecución, la cual llevaría a un choque y ambos detenidos.
Miraba de reojo a sus costados, buscando un lugar por donde pudieran esconderse y despistarlos sin desviarse de la carretera, evitando así cualquier accidente. Hasta que reconoció esas calles y una idea llegó a su cabeza gracias a Dios. Recordaba que cerca habían unos callejones estrechos y oscuros, si se metían en uno y hacían el mínimo ruido posible, tal vez podían salirse con la suya.
Giró su cabeza hacia su compañero, notando que parecía estar más tranquilo que antes. Una expresión de preocupación se plasmó rápidamente en su rostro, temiendo que el pelirrojo llegara a desmayarse por la pérdida de sangre y que llegara a complicar su huida. Pero al ver que se movía incómodo en su asiento, un suspiro no tan aliviado salió de sus labios, desviando su mirada hacia la carretera una vez más y viendo por donde podía girar para llegar a ese lugar.
ㅤㅤ─────¿ Crees aguantar mucho más ? ─────Le preguntó sin siquiera mirarle, acelerando para ganar tiempo en la hora de esconderse.
ㅤㅤ─────T — Tú tílale . . . ─────Le respondió con un hilo de voz, con sus ojos entrecerrados y su espalda curva hacia adelante, mirando el suelo del vehículo aún con el fuerte agarre en su brazo.
Armando simplemente quiso dejar pasar todo lo malo que pudiera suceder, en primer lugar las heridas que podían empeorar del otro chico para no alterarse más de lo que ya estaba. Tomó aire y lo fue expulsando lo más lento que pudo.
ㅤㅤ─────Agarrate como puedas.
Dicho eso, el asiático giró su cabeza hacia él, alzando una ceja con una expresión de confusión por no saber los planes del mayor, soltando un chillido agudo de sus labios al ser estampado contra la puerta con un giro brusco al cambiar de calle. Quiso maldecirle, pero solo se limitó a ver como con unos rápidos movimientos que con suerte fueron controlados a la perfección, logró meter el coche en un pequeño y estrecho callejón, apagando el motor al momento y quedando en un completo silencio. Escuchaba las sirenas de lejos, y milagrosamente se iban alejando de ellos. Las luces desaparecieron a los pocos segundos, quedando solo el sonido de las respiración aceleradas de ambos chicos.
El jefe de los mecánicos se apoyó en el respaldo del asiento, soltando un suspiro aliviado nuevamente al ver que había logrado distraerlos. Pensó que tal vez su plan no funcionaría, y ya estaba preparándose para su futura muerte, la cual no llegó y juraría que no llegaría tan pronto. No así.
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#ㅤ𝐍𝐄𝐕𝐄𝐑 𝐋𝐄𝐀𝐕𝐄 𝐔 | yunando。
Fanfic« Prometo que si quieren hacerte algo, primero tendrán que pasar por encima de mi cadáver. » GTA V RP fanfic . ¡¡ Yunando ; Yun × Armando or Chino × Nadando . Si no te gusta, evita malos comentarios. ♡ No copias ni adaptaciones. ¡!