Capitulo: 15

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¡Hoy era el día!.

Pase por ti a las cinco de la tarde.

Estabas tan hermosa que mis pupilas se dilataron tan solo mirarte.

Quería probar tus labios.

Te pedí tu brazo como los caballeros de los libros que tanto te gustan y me despedí de tu madre Eleonor.

Estabas muy sonrojada, parecías un tomate, no pude evitar reír de tanto ternura.

—¡No me veas así estoy muy nerviosa Bruce!— yo también lo estaba.

—Ya deja de hablar y vamos a mi auto— te abrí la puerta de este y luego fui a mi asiento y te lleve rumbo al parque.

Empezaba hacer algo de frío así que decidir sacar el regalo que tenía escondido detrás de mi auto.

Lo mantuve escondido hasta el final del recorrido.

Llegamos a la cima de una especie de colina y tendí una manta para no llenarnos de tierra y esas cosas.

Estabas mirando el increíble paisaje.

—Luz— tu nombre es mis labios era la cosa más dichosa que podría decir.

—¿Si Bruce?— te volteaste a mirarme, la poca luz del sol reflejaba tu cabellos castaño con las hermosas mechas color crema.

Era una verdadera obra de arte.

—Seré directo... ¿Quieres ser mi novia?—.

Ese día te ví desde la colina muerto de los nervios.

Dijiste que sí.

Amor a primera vista✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora