Parte 7: Fin

113 8 4
                                    

*Santuario*

Aun seguíamos bajo la presa sentados en el pasto, estoy mas tranquilo al tenerla conmigo, me siento bien al estar con ella por que calma toda la oscuridad que tengo en mi interior. Jamás pensé que propondría irnos juntos, solo quería alejarme para no tener el miedo constante de lastimarla pero aun así ella quiere estar conmigo y no sabe lo feliz que me hace.

- Ya es tarde, deberíamos buscar donde quedarnos esta noche y mañana irnos a donde tu quieras - Ella estaba abrazada de mi brazo y su cabeza posada en mi hombro, me encantaba tenerla así

- Supongo que tendremos que encontrar una manera de salir de esta isla, no creo que quede otro helicóptero a parte del que tiene midas en su base de parque placentero

- Tal vez podamos usar una lancha, que mas da en que nos vayamos, solo quiero estar contigo

Se me formó la sonrisa mas grande que jamás había tenido - viviremos juntos... jamás pensé que esto seria posible, todo el tiempo callándome lo que sentía por ti

- ¿Como pudiste soportar todo este tiempo guardándote eso?

- Solo quería que fueras feliz y eso lo veía con midas y no conmigo - gire para verla a los ojos y tomarla de sus manos - siempre quise lo mejor para ti aunque no fuera a mi lado. Mientras te viera sonreír mi corazón estaba tranquilo

- Siempre sacrificándote por todos ¿no? - me tomo de la cara con ambas manos - ahora eso quedara atrás, solo me iré contigo y me encargaré de que no haya sentimientos de ira en tu corazón, haría hasta lo imposible por verte feliz y no decaigas de nuevo en ello. Ahora tienes a alguien que te ama - me sonrió dulcemente y no podía escuchar una palabra de ella sin derramar una lágrima, todo lo que soñé de verdad estaba pasando. Me acerque para besarla y sentir miles de veces ese sentimiento cuando podía chocar mis labios con los de ella.

Quedamos unidos de nuestras frentes - aun recuerdo ese momento donde llegaste a asustarme fue la única vez que quede tan cerca de ti viendo tus ojos azules, eres tan hermosa. Me paralice en ese instante

Soltó unas pequeñas risas - aun lo recuerdo, por unos segundos te me quedaste viendo fijamente y no te movías. Cuando me acerque la primera vez y giraste apuntándome con esa ballesta vi tus ojos rojos con esa mirada tan profunda, debo admitir que si me gustaron.

- Te adoro ¿Lo sabes? Me encantas ¡TE AMO! - me puse de pie y la levante en mis brazos besándola y después solamente caminamos platicando de algunas otras cosas hasta que por fin encontramos una pequeña cabaña en medio de un prado. Entramos y estuvimos un tiempo recordando algunos momentos que pasamos juntos mientras reíamos y la noche entraba. Encendimos una fogata en la pequeña chimenea ya que no había electricidad, nos quitamos los zapatos y nos sentamos abrazados en un sillón enfrente de ésta.

- Es lindo tener esta tranquilidad después de tanto tiempo de angustias. Después de sufrir tres veces viéndote casi morir. No sabes el miedo que tenia de perderte. Pero por fin te tendré conmigo - le sonreí dulcemente y nos quedamos viendo en silencio por unos segundos hasta que ella lentamente se acerco a mis labios y me beso con tanta pasión.

*Narradora*

A santuario se le salía el corazón cada que ella lo besaba pero esta vez el beso estaba llendo más allá haciendo que se agitara después de unos segundos. Se separaron ambos con las respiraciones aceleradas pero no fue impedimento para que Santuario besara el cuello de ella, eran pequeños besos húmedos que disfrutaba. Jey cerro los ojos disfrutando de igual manera volviendo a unir sus labios en un profundo beso. El empezó a bajar el cierre del traje dejando ver su ropa íntima, la tomó por la espalda acercándola a el quitandolo por completo Él mismo se quitó todo el resto de armadura que llevaba siempre en sus brazos y la dejó caer a un lado, jey empezó a desabotonar los dos broches que sostenían la armadura de su torso dejando ver un muy trabajado cuerpo. Santuario no paraba de besarla y desearla cada segundo más. Se levantaron del sillón y este la tomó por las piernas cargándola posicionandola en su cintura mientras se encaminaba a la cama para recostarla. Se quitó el pantalón quedando en boxer y se unió de nuevo a Jey en la cama dándole múltiples besos en su cuello acariciando la silueta de su cuerpo. Ella acariciaba la espalda y el torso de su hombre también dejando besos en su cuello, retiraron su ropa íntima quedando compeltamente al desnudo. Santuario la tomó de la cintura y se dieron vuelta quedando sentados en la cama ella encima de el uniéndose en uno solo - eres tan delicada como un pétalo, despiertas en mi tantas emociones - la beso apasionado para separarse unos segundos después por lo agitados que estaban.

Final AlternativoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora