—Espera, repite eso de nuevo— Inquiere Niall tan pronto las palabras han salido de la boca de Louis.
La cafetería escolar parece estar más ruidosa en el día de hoy, y de alguna manera Louis siente que el bullicio se le está metiendo por los oídos y se está quedando atrapado en su cabeza de la peor de las maneras.
Está perturbado, mucho más de lo que Niall se encuentra ahora qué lo ha escuchado decir aquello. Ni siquiera le ha dado el primer mordisco a su emparedado de queso, y no cree ser capaz de dárselo después de saber qué está sucediendo, o por lo menos, lo que puede pasar.
A los ojos de cualquiera no sonaría como un verdadero problema, en realidad Louis a lo mejor está haciendo demasiado escándalo por una simple asignación grupal. Sin embargo, considera totalmente válido su nervio al respecto porque es plenamente consciente de que es más de lo que puede soportar cuando su pareja de estudio es alguien en particular.
Deja escapar un largo suspiro, como si estuviese agotado ya y apenas es la hora del almuerzo.
—Harry y yo somos compañeros en el proyecto de ecología— Repite con pesar. La boca le sabe mal y tiene este nudo en el inicio del estómago que le deja esta sensación nauseabunda e insoportable. —El señor Fitz nos ha puesto a hacer una maqueta sobre algún ecosistema que nos interese y hacer una presentación detallada.
—¿Y cómo es que has logrado ser la pareja de Harry?— Inquiere el rubio, como si fuese alguna conspiración universal en donde solamente fuerzas divinas o sobrenaturales son capaces de ponerlos a ellos dos juntos.
Louis le quita un pedazo de corteza a su pan y arruga las cejas mientras menea la cabeza, casi mofándose de las palabras que está por soltar.
—El profesor ha elegido los grupos por orden de la lista, y al parecer Harry y yo somos los únicos que tienen apellidos con S y T. Ugh— Se queja al final, con frustración sincera. Mira a Niall con cierta desesperación. —Esto es espantoso. No puedo creer que me esté pasando justamente a mí.
Bien, es posible que sus oraciones suenan como si él realmente detestara a Harry posiblemente hasta la muerte, pero la verdad es que es algo así como todo lo contrario. Louis no podría odiar a Harry ni en un millón de años, honestamente sería humanamente imposible sentir cualquier cosa negativa hacia aquel muchacho de rizos perfectos y hoyuelos encantadores.
Todo el mundo en el Instituto lo adora. Lo consideran amable, gracioso, sumamente inteligente, y un montón de adjetivos positivos que ciertamente le quedan muy bien. Sin mencionar la popularidad que lleva consigo al ser el capitán del equipo de animadores y el presidente de la mayoría de los grupos y comités existentes en la escuela.
No hay una sola persona en aquel lugar que lo supere, que consiga opacar ese resplandor que Harry desprende con su sola presencia, menos después de haber sido catalogado como el muchacho más valiente de todo el año escolar al revelar que es homosexual.
Han habido muchas decepciones por parte de las chicas que han creído que tendrían la más mínima posibilidad de ganar el corazón del chico más maravilloso con los pies puestos en la tierra. No obstante, y de alguna manera que Louis todavía no concibe ni está cerca de hacerlo, es que aquella confesión solo ha logrado sumarle puntos a su reputación intachable.
Nadie parece tener un problema con Harry siendo gay, lo siguen tratando como siempre lo han hecho y la vida sigue siendo de color de rosa para él.
Y es asombroso, y tal vez Louis le tiene un poco de envidia, y a veces piensa que todo esto se trata de exactamente eso. Sin embargo, sabe que no es verdad, que en realidad no lo aborrece, ni un poco, lo cierto es que él está algo así como increíblemente enamorado de Harry en secreto, y su vida cuando no sabía que a aquel rizado le gustan los chicos solía ser un tanto más sencilla de lo que es ahora.
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Afternoon ✦ larry au! | ✓
FanfictionLouis tiene un enamoramiento con Harry que nunca se atrevería a confesar, pero cuando les asignan un proyecto y deben trabajar juntos en casa de Louis, él decide qué tal vez es el momento para decirlo. Antes de que pueda hacer nada, Harry ve a la ma...