Azur Lane Corruptus

Capítulo 4: El Shikishima

El Reformador navegaba en el Triángulo de las Bermudas

Héctor: Ya es de noche

Brad: Ojos bien atentos no sabemos qué tipo de buque es

Se dirigían hacia un barco que localizaron hacia el sur

Operador de radar: Capitán estamos a 50 metros del buque

Elías: No veo nada

José: A pesar de que está usando las luces la niebla impide ver a los alrededores solo se ve como 5 metros

Siguieron navegando

Operador de radar: Ahora estamos a 30 metros

Brad: Ya debería ser visto pero no

Operador de radar: 10 metros

Héctor ve al frente del buque y al ver algo raro

Héctor: MURO ADELANTE

Todos ven al frente y ven un muro de acero

Brad: GIRA TODO A ESTRIBOR

El timonel gira el timón a estribor

Elías: PREPARENSE PARA EL IMPACTO

Todos se alistan por si choca pero solo alcanza a arrastrar la popa antes de seguir

Héctor: Eso estuvo cerca

Brad: Por Dios un acorazado que hace aquí

El enorme buque que localizaron era un acorazado

Elías: Creí que lo acorazados eran historia

Héctor: No olvides que estamos en el año 1940 por lo tanto las armas como los misiles no existen aun

Brad: A qué país pertenece

Debido a la niebla y a la oscura noche no se sabe cuál acorazado es

José: Y si mejor investigamos

Héctor: Buena idea

Se preparó a un equipo de investigación

Héctor: Siempre quise hacer esto de lanzar un arpón como Batman

Elías: Yo también

Héctor y Elías lanzaron los arpones y cuando vieron que quedaron enganchados se pusieron a subir

Héctor: Una carrera hermano

Elías: Claro

Ambos se ponen a subir debido a que tenían que subir una gran altura batallaban cuando estaban por llegar

Héctor: Te voy a ganar

Elías: No lo creo

Ambos aun subían hasta que llegaron a la cubierta

Héctor/Elías: GANE

José: Les ayudo

Héctor/Elías: Eh

Ambos ven como José les da las manos para ayudarlos a subir

Héctor: José a qué hora subiste

Elías: O más bien como subiste

José: Usamos las escaleras que estaban en el casco

José gira su lámpara a ven que a 7 metros de donde subieron había escalera donde varios de los soldados también subían

Héctor: Y porque no nos dijiste

José: Le gritaba y les gritaba pero estaban tan atentos a su competencia que me ignoraron