6.- El Dia de Misaka

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¡Bien, aquí está el próximo capítulo! No hay mucho que decir al respecto, aparte de que he estado planeando esto durante la mayor parte del año. Espero que te guste lo que hay en la tienda, ¡y recuerda revisar y suscribirte!

- KKid

Capítulo 5: El día de Misaka

La mañana llegó demasiado pronto para Kirche. Una brisa del exterior rompió las cortinas de su ventana, permitiendo que la luz del sol se filtre a través del marco y sobre su cama. No ayudó que la ventana hubiera sido destruida por la conmoción de la noche anterior, y la brisa cosquilleó en los pies de la alemana, combinándose con la luz del sol para finalmente despertarla de su sueño.

"... Ooohh ..." bostezó, estirando los brazos en el aire. "... Hoy es el Día del Vacío ..." Miró a la ventana, preguntándose por unos segundos por qué había marcas de quemaduras en el marco y ninguna ventana adentro, antes de recordar lo que había sucedido anoche. "... Bien, traté de preguntarle sobre su mundo, y luego me interrumpieron, y ella se escapó mientras yo me ocupaba de los intrusos." Eso fue todo el pensamiento que puso en la ventana que faltaba, además de una nota mental para que la reemplazaran más tarde.

Kirche tardó media hora en prepararse. Como cazadora nativa, la noble Zerbst tenía que estar preparada para cualquier cosa, ya fuera un hombre que quisiera salir con ella o, y su objetivo más actual, si era multar a un artefacto de otro mundo. Específicamente, estaba cazando a cierta hembra que disparaba rayos.

"Tenía muchas ganas de preguntarle de dónde vino, cómo es y cómo puede manejar los poderes del rayo sin usar ninguno de los pentagramas", se dijo a sí misma, mientras se maquillaba y se ponía su mejor uniforme. "He visto muchas cosas asombrosas de lo que mi padre me mostró en Germania, pero nada de eso indicó que su gente sería como nosotros, pero sin varitas y hechizos".

"Kyuuku..." siseó Flame, frotándose contra las piernas de su amo.

"Por supuesto, no hay nada más asombroso que tú o yo, mi querida Flame", dijo Kirche, y se rió entre dientes. "Aún así, quiero aprender más sobre Misaka. Sin embargo, me pregunto por qué ella dudaba tanto en responder mis preguntas. Después de todo, habría sido sólo lo básico; nada demasiado difícil o confidencial." Ni una sola vez pensó en culpar a sus gestos y elección de ropa.

Mientras terminaba de aplicar el lápiz labial rojo cereza, la última parte de su rutina diaria, escuchó el relincho de un caballo afuera, más dos voces femeninas que venían de la misma dirección. Esto llamó la atención de Kirche y salió a la ventana para ver qué estaba pasando. "¿Eso es... Louise y Misaka?"

Decir que la primera vez que Misaka montaba un caballo no iba como esperaba era quedarse corto. O Louise estaba haciendo que el caballo avanzara bastante rápido, o el campo eléctrico subconsciente de Misaka estaba causando que el caballo se pusiera nervioso, porque el animal estaba dando un paseo muy brusco, saltando arriba y abajo con cada galope. Cada vez que el caballo bajaba, enviaba los muslos de Misaka contra las costillas del caballo, creando un dolor que era insignificante, si no iban a cabalgar durante tres horas hasta la capital de Tristain.

"¡¿No puedes hacer que este caballo vaya un poco más fácil ?!" le protestó a Louise. "¡Parece que nos vamos a caer en cualquier momento!"

"Soy bastante buena montando a caballo, así que no te preocupes por las caídas", le aseguró la pelirrosa. "Agárrate más fuerte si eso te hace sentir más seguro."

"Bueno, 'bastante' parece estar más cerca de 'apenas' que de 'realmente'", gritó Misaka. "¡Incluso los vuelos de teletransporte de Kuroko son menos devastadores!" Ella apretó su agarre alrededor de la cintura de Louise; sin embargo, el movimiento de rebote combinado con la tensión de la holgura hizo que sus manos se movieran hacia arriba, hasta que estuvieron alrededor del pecho del noble.

Un cierto familiar científicoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora