El perdón.

9 1 0
                                    

Perdonar... ¿Realmente estamos perdonando a las personas que nos hacen daño? ¿O solo nos limitamos a vivir con el rencor y odio que nos causa esa persona?; a veces perdonar nos resulta dificil, creemos que con decir '' ya te perdoné'' hemos sanado la grieta pero no, el perdon es algo más que una frase, es soltar todos los pequeños sentimientos que tengas, es buscar razones para volver a esa persona con ojos de misericordia y compasion, es darte cuenta que envenenas tu vida odiando a una persona cuyo corazón esta envuelto en malas vibras y nunca verá ni una parte de lo que hiciste por él.

Por eso decidí perdonarlo, no llevar esa carga por el resto de mi vida, decidí dejarlo libre, soltarlo dejarlo que sea feliz aunque no fuera como yo lo planee, es inevitable verlo y sentir nada, pero su ausencia me ayudaría a rehabilitar mi vida social y espiritual, la paz interior que creí que dependía de él la obtuve con mis propios esfuerzos, llenándome a diario de buenas vibras y sonrisas a todo aquel que se me cruzara.

Total, ya la tormenta ha acabado ¿No?

A él solo me queda decirle que gracias por lo bueno pero aún más por lo malo; nunca tuvo la culpa suficiente de todo aquello que vivimos, yo no debí dejarme llevar por tanto.

Pero bueno, para eso son las caídas, para aprender y levantarte.

Nunca pensé que sería tan difícil perdonar, pero la descarga de energía negativas que sientes cuando aquello sucede es inigualable, tu vida cambia, tomas decisiones diferentes a las que fueras tomado antes, piensas en el bienestar no solo tuyo si no de la otra persona también, sientes amor compasivo, lo ves con misericordia, entiendes que su vida ha sido un desastre desde siempre y que fuiste tú quien decidió unírsele al desastre y salir de allí dependía de ti también.

Los días de lluvia suelen remontarme a momentos de mi vida en los que creí ser feliz.

Y evidentemente lo era, lo tenía a él, a mi familia y creía que todo lo que hacía estaba bien, así mismo en un día como hoy lluvioso suelo recordarlo, pero aquel chico que conocí, sin dolores, con una sonrisa que a pesar que escondía los mil y un males irradiaba luz, ahora no queda ni la sombra de ese jovencito de ojos cafés que me hacía volver una y mil veces el alma al cuerpo con un abrazo, Hoy la veo y no puedo más que sonreír, a pesar de todo, y desearle lo mejor. Es un amor de persona, siempre lo fue. Y cada vez que lo veo comprendo por qué me volví loca por el. Un par de meses después y sigue siendo igual de maquiavélico e inteligente, digita su vida como un artesano y suma regalías en cada paso que da.


Pero sus ojos no mienten, no podrán mentirme jamás.

Aún sigue siendo el niño que quiere todo a sus pies sin medir consecuencias, pero aun así siempre seré su Ángel guardián porque a mi lado llora y se siente libre, renace y se vuelve fuerte. A mi lado se vuelve frágil y desarmado, porque es a mí la persona que nunca podrá mentirle aun mirándola a los ojos, Yo sé que en ocasiones me extraña y que soy su secreto. Porque lo que nos mantuvo unidos es más fuerte que el tiempo. Nunca lo olvidaré, aunque se vaya lejos. Aunque divida sus días entre amores posibles, en sus ratos libres, cuando su fantasía lo trae conmigo y vuelve a ser el pequeño que solo buscaba un abrazo. Yo le daría miles si no estuviese tan lastimada... si yo no me hubiese equivocado tanto, si el no fuese mi peor desatino y mi condena.

Ya no lo amo, pero sin embargo me preocupo por él y lo pienso

En muchas ocasiones también oro por su bienestar y que pueda lograr todo lo que desea, porque a pesar de tanto daño, el merece lo mejor. Estos días en que he sentido que puede necesitarme, me tomé fuerte de la mano de los que me quieren bien, tan solo para no buscarlo. Y esta fortaleza que le niega mi presencia, me ha negado poder abrazarlo fuerte y desearle lo mejor. Pero yo sé que el leerá esto, y que estará sonriendo feliz. Y desde aquí lo abrazo fuertemente, y le doy el mejor de mis besos. Y ese "te quiero" infinito que solo se siente por aquella persona que intentamos salvar alguna vez. Y lo dejo libre, lo dejo ir, y le suelto la mano. Luego bajo la mirada, me veo a mí misma, y me siento muy sola. Tal vez esté dejando ir a quien más ame en la vida, y sin embargo...no puedo evitarlo.

Tuve que llorar mucho para llegar hasta aquí, tuve que dejar mil cosas de lado por mi felicidad, pero todo tiene su recompensa y yo estoy luchando por ella.

Yo le hubiera dado mi vida.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora