Capítulo 3 ( El Aburrimiento Del Poder )

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Narra:???

Una sombra se presentaba dentro del imponente castillo, únicamente deambulando por los pasillos en completa soledad observando a través de las ventanas el movimiento de los seres que poblaban los alrededores viviendo vidas tranquilas y pacíficas.

Aquella figura observaba fijamente con las manos en la espalda, apenas alcanzando a observarse su rostro debajo de aquellos ropajes que le protegían de la tenue luz que se filtraba sobre el.

-han pasado siglos desde ese día...a veces extraño la sensación del sol-

Este observaria sus manos cubiertas por guantes únicamente por un par de segundos antes de alejarse del ventanal y continuar su caminata a través del corredor decorado con esculturas y cuadros de distintos miembros de la nobleza.

-pero ya es suficiente de lamentos, debo apoyar a la población en todo lo posible...aunque pueden subsistir solos, no soy más que uno más de ellos.

(aunque no esta mal ser un rey).

Rey Richard:

(Avanzando por aquellos corredores terminaría en la sala del trono posandose al frente de este solo para observarlos con una vista cansada soltando un largo y pesado suspiro al recordar como había llegado hasta allí.)

Cerraría los ojos por un momento solo para hundirse en los recuerdos de miles de años, algunos aparentando ser tan frescos como si fuesen del día anterior y otros extremadamente borrosos que apenas se mantenían allí.

-(¿Comienzo a creer que necesito un descanso?...

¿Cuantos reyes existieron?)

¿En serio llevo tanto tiempo aqui?-

¿ Cuando volverá mi hija?

¿ Habrá algúna otra persona que se sienta tan vacío como yo?

¿ Y si renuncio?

(¡No! . No puedo renunciar el pueblo cuenta conmigo, ¿cierto?

_Abría sus ojos para observar una vez más aquél trono vacío al igual que los dos a sus costados...Olvidandose de los malos recuerdos, aquella figura se decidiría a salir de la sala del trono con el mayor sigilo posible, incluso un rey a veces necesita escaparse de sus guardias para divertirse_.

_Aquél hombre habia logrado escapar de su propio castillo por la parte trasera del mismo, rápidamente comenzó a caminar para no llamar tanto la atención entre las personas.
Su vestimenta cubría a la perfección cada centímetro de su cuerpo haciendo imposible que le llegaran a reconocer, solo destacando ligeramente por el suave tono rojizo de sus ojos.

[El Castillo Negro]

_Avanzaria sin rumbo por un buen tiempo hasta llegar a un bar, uno que ya frecuentaba bastante cada vez que se escapaba para caminar, entraría solo para notarlo casi vacio y un cartel para un torneo clandestino

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_Avanzaria sin rumbo por un buen tiempo hasta llegar a un bar, uno que ya frecuentaba bastante cada vez que se escapaba para caminar, entraría solo para notarlo casi vacio y un cartel para un torneo clandestino._

La leyenda de Marcus Williams Donde viven las historias. Descúbrelo ahora