El Invencible.

Capítulo 9: Intranquilidad.

//El miedo a morir te hace atesorar con mayor fuerza tu propia vida y la de los cercanos a ti, aferrarte con fuerza a ella impulsado solo con la ferviente determinación en tu corazón para pelear y ganar. Dichas emociones gobernaron sobre la mente de los jóvenes estudiantes de la U.A. quienes a bordo de un autobús iban de regreso a su escuela, acompañados de varios oficiales escoltandolos. Habían vivido una situación que se suponía no debían vivir hasta al menos estar mas preparados para el mundo real//

Mineta- E-Eso fue horrible!!!//Se quejo el pequeño peliuva lágrimeando ligeramente, secundado por cierta rubia con un mechón azabache//

//Nadie dijo nada después de todo las minas palabras circulaban alrededor de sus cabezas también, habían visto la cara a la muerte y sobrevivieron peleando; aunque la verdad es que muchos se sentían inútiles, después de todo de no ser por Izuku, Bakugo, Asuka y Reiji hubiesen estado perdidos; lo agradecían profundamente sin dudas, pero el malestar en su pecho que gritaba que debían haber hecho más seguía presente, después de todo querían ser futuros héroes//

Kendo (Fatigada con los signos de la lucha en su sonrojado rostro)** C-Ciertamente, si que ha crecido...**

//La pelinaranja no notaba la dirección de su propia mirada dirigida al pecoso a su lado, y la verdad en su mente no cambia nada que no fuesen las memorias de esa maravillosa infancia   que pasó junto a él, de aquel nervioso, tímido y tierno chico que , y a paso veloz y seguro las minas fueron remplazadas por los recuerdos de su experiencia reciente, que a pesar de todo eran llevaderas. Si, sin duda estuvieron en grave peligro y sin duda tenían miedo pero, Izuku los ayudo, los protegió, sin dudar era el mismo chico que ella recordaba, ahora eso se lo aseguró. Aunque en su corazón aún había un hueco de duda, ¿Era realmente el chico junto suyo el que recordaba?, bueno no importaba el hecho de que sus ojos verdes como los pastorales del campo lo pudiesen ver de nuevo junto a ella y tan al alcance e sus manos eran suficientes para ella, quien en esta vida puede tener el privilegio de volver a ver a alguien más preciado que el mismísimo oro cuando lo creías perdido en el territorio inexplorable del pasado?//

Kendo** Si que ha crecido...**

Yui** Las personas son raras; bueno sin tomar en cuenta los quirks claro, Midoriya-san siempre dijo que quería ser un héroe peor nunca lo ví usar su particularidad a pesar de que muchas veces intentaron hacerlo sentir menos o intimidar, el... solo ganaba con la fortaleza de sus palabras, pero ahora dudo si en realidad alguna otra razón era por qué no quería lastimarlos, es muy fuerte, me suena difícil creer que estoy al costado de aquel mismo chico serio de mi clase. Y además...**//Viendo a su nueva presidenta de clase discretamente quien veía al igual que ella aunque está misma no lo notará al pecoso chico entre ellas//**No esperaba que se conocieran...**

//El siempre tramposo destino para unos, la juguetona casualidad para otros gustaban de ser los manipuladores en el juego de ajedrez de las vidas humanas o por lo menos eso pasaba por las mentes de las más desconfíadas personas, pero de algo no cabía duda el pecoso definitivamente estaba en una situación un poco "rara". Dos chicas, bellas como las flores de primavera, que había salvado estaban sentadas a sus costados, el autobús en el que iban estaba casi lleno de chicas a excepción de 3 o 4 incluyendolo. Justo en frente suyo iba cierta peliceniza viéndolo de reojo con bastante furia entintada en sus agudos ojos, a su derecha una azabache cansada y tratando de alejarse de cualquier posible rabieta de su reciente compañera de clase, por su lado en la izquierda venía con su habitual expresión estoica de siempre miraba hacia el frente aunque no pudo evitar que se escapará de si una mirada fugaz hacia el mismo objetivo de la mayoría en el autobús y no era para menos dada la emocionante pelea que había librado el pecoso//