¿Y qué si soy Omega?

10-"Recuerdos"

"Todo estaba oscuro en aquella habitación. Nosotros no deberíamos estar aquí. Yo podría distinguir el olor a feromonas mismo siendo un "omega recente". Mi primo estaba jadeando mientras estaba sosteniendo el borde de su camisa. Él mi mira y dije en una voz que no logro escuchar bien: "Huye"
Sigo mirando su rostro rojo sin entender lo que está diciendo y el vuelve a repetir: "Huye! No puedes quedarte aquí."
Lo que mi primo estaba diciendo era cierto. Yo no podría, ni debería quedarme. Pero tenía miedo de dejarlo sólo."

Me desperté asustado más una vez. Hacía tiempo que no soñaba con esto, probablemente pasó porque ahora sé que el volverá.

Hace trés años, cuando yo tenía 13 y Caled 15 años, estábamos en camino de la tienda de té que estaba cerca de la universidad de mis hermanos. Una vez o otra, íbamos juntos a encontrarlos. Como buenos alfas superiores que son, ellos ya estaban en el segundo año de la Uní y acababan de iniciar sus pesquisas de proyecto, así que siempre estaban animados para contarnos cosas a respeto. En una de esas veces, el celo de Caled llegó por primera vez.

Él empezó a esparcir feromonas por la calle pero no nos demos cuenta hasta que trés chicos betas se acercaron y nos ofrecieron ayuda. Mi corazón tembló, no quería aceptar. Estaba con miedo, totalmente asustado de aquellos chicos. Ellos nos ofrecieron supresores y ahí fue que nos ganaron. Por supuesto, la droga no era un supresor. Nosotros pensamos que nos dejarían, pero nos llevaron hasta una habitación de karaoke con la excusa de que podríamos nos proteger mejor allá en cuanto llamabamos a alguien.
Así que llegamos, empezaron a ordenar bebidas. Tiempo despues llegó un hombre alfa que empezó a esparcir feromonas haciendo que el celo de Caled, que apenas se notaba, fuera acelerado. Los chicos empezaron a tocarlo y fue ahí que el, con los ojos llenos de lágrimas, me ordenó que huyera. En cuanto estaban todos interesados en el chico en celo, yo, que a sus ojos no pasaba de un pequeño niño, me escabullí de allí y llegué a el hall del karaoke. Terminé por tropezar con un hombre que parecía tener la edad de mis hermanos y lo imploré por ayuda. Este tipo me dejó en el hall y fue hasta la habitación que lo informé. Vi el tipo salir  con Caled en los brazos, 20 minutos después. Caled estaba desmayado. No vi a ningun de los otros tipos. El hombre nos llevó a el hospital y Caled despertó con un ataque de pánico. Por suerte, el tipo estaba allá y esparció sus feromonas que lo tranquilizaron. Días después, Caled había salido del hospital y todos estábamos felices. Supe que el chico que nos ayudó buscó a Caled algunas veces, pero el lo rechazó. Mi primo se quedó traumado. Poco tiempo después, fuímos informados que Caled habia sido marcado y no sabían quien fue que lo hizo.

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