Capítulo 11: Dejar de correr

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"Alguna vez va a arrepentirse".- miro el pequeño sofá en el que su amigo se acurrucaba.

"Lo dudo mucho".- susurro abrazandose asi mismo

Suspiro y miro hacía otro lado restando importancia.

"De todos modos no te merecía".- dijo con claro disgusto. "Incluso era fastidiosa".

"Era mi novia Ed"- rodo los ojos ante su nuevo amigo.

"Era, pasado, superalo de una vez".- se acomodó sobre la cama.

"No es tan fácil, sólo pasaron unos días".- finalizó con un puchero e inclinó la cabeza con melancolía.

"Por Dios, sólo salieron pocos meses, llegará alguien mejor Lolo".- miro a su mejor amigo. "No dependes de nadie para ser feliz pero si llega alguien te aseguro que será mejor que ella".

"¿Cómo estás tan seguro?".- giro hacia Ed poco a poco.

El mayor rio, acaricio la espalda de Louis. "Porque Louis Tomlinson sólo puede rodearse de cosas buenas".

"Ojalá que sea como dices".

"De igual manera.. me tienes a mi, no soy una novia pero si un amigo al cual puedas recurrir".- fue a abrazar a Louis.

"Gracias".- suspiro secando las pocas lagrimas que amenazaban con salir.

La realidad cayo de repente en la cara de Louis, su novia, su adoración lo había dejado. Pero era más que eso, saber que en cualquier momento las personas que lo rodeaban podrían darle la espalda, llegó a atemorizarlo.

Entender que no estarían con el, que rn cualquier momento se llegarian a cansar de esperar le dio terror.

Quizás sólo exageraba pero ¿Y si pasaba? ¿Si lo dejaban sólo? ¿Si se quedaba sin amigos o familia?

¿Si no lo lograba?

Podrían instalarse inseguridades. Podria hablar por afuera pero sus verdaderos miedos sólo los guardaba muy dentro suyo. Como cada noche que no dormía por pensar en el tan esperado 'futuro', uno que era incierto tanto que la idea lo mareaba. Uno del que el no tenia idea.



...




Cansado de tantos análisis e inyecciones ya quizo volver a casa, cada minuto en ese lugar era recobrar los recuerdos, tanto los buenos como así también los malos. Los dolorosos y agobiantes recuerdos

Se sentía estresado. Nadie le informaba sobre el horario en el que podría irse. Su mamá no aparecía y si bien ya era mayor de edad el verla lo hacía sentir un poco más seguro.

Rasco su cabeza mientras daba vueltas en la habitación. Habían pasado ya unos minutos desde el almuerzo y creía que para entonces sería dado de alta.

Necesitaba trabajar, si seguía internado perdería el empleo. No quería agregar un problema más a la lista de los que ya tenía.

"Louis harás un hueco de tantas idas y vueltas".

Su rostro se giró de repente cuando entró el médico que lo atendía. Parecía alegre, el sonrió por inercia.

"Son los nervios, se supone que ya debería irme". Se sentó en una silla esperando a que el hombre hablara

Stay With Me. (Larry Stylinson) EN PROCESODonde viven las historias. Descúbrelo ahora