Dado sin palabras el adios
estragos ocasionados al corazón;
Por gracia no mas de Dios
en esta vida, sin tí, pierdo la razón.Son días y años eternos
y aún el sabor agonizante.
Que triste, por nueve meses querernos
y de pronto, solo me queda, una soledad desesperante.Entraña de mi vientre,
suspiro fiel de mi alma.
Tu vida a mi aferraste,
y una partida incierta hoy me quita la calma.Cuerpo celestial, ángel de amor,
vuelve a mí, mi osito de azúcar,
llena de vida ha este cuerpo de dolor;
Mí paz en tus brazos voy a encontrar.