Daddy Lessons 🍃 | J.HS

Capítulo 1┊Extraño

“Recuerda, pequeña, no todas las personas son como se muestran, así que ten cuidado, porque en este mundo quedan pocas personas con buenas intenciones”.

Sentada en mi ventana ventana, mirando el alba salir mientras terminaba de fumar el cigarrillo entre mis labios. La vista es realmente majestuosa, me hacía recordar las veces en que papá y yo salíamos a esta misma hora al techo para admirar este hermoso paisaje.

Terminado mi cigarrillo, lo tiro al suelo y lo hago añicos con la suela de mi zapato mientras decido tirarme un rato en mi cama. Después de todo aún es temprano. Puse un poco de música clásica y me relajé hasta dormirme.

[…]

— ¿DÓNDE ESTÁS, ÁNGEL? —me levanto asustada por aquél estruendo de una puerta chocando contra una pared y alguien gritando como loco. Entonces me doy cuenta que es el tarado de mi mejor amigo y me tiro de nuevo con molestia en mi cama tapándome con la cobija esperando que no llegara a perturbar la paz que tenía.

Tristemente no fue así, pues al parecer no le bastó con tirar la puerta de la casa y decidió tirar la de mi habitación.

— ¿Qué haces dormida? ¡Se nos hace tarde! —oh, cierto— ¡LEVÁNTATE EN ESTE INSTANTE O TRAERÉ UN BALDE LLENO DE TIERRA Y TE LO ECHARÉ ENCIMA!

— ¡Ya, ya! Cálmate hulk —respondo mientras salgo de entre las cobijas—, tú sabes que soy bastante rápida para arreglarme, además, no creo que estemos tan tarde —le digo al levantarme y entrar al baño para peinarme.

— ¿Te das cuenta que faltan sólo dos minutos para las ocho? —pregunta de forma obvia y sarcástica mientras se cruza de brazos.

— Ugh, sólo perderíamos la primera clase, no es para tanto.

— Eso sería aceptable para mí, pero tu rendimiento va de mal en peor, ¿Quieres echar a perder este año? —más que decirme me regaña. Sé que se preocupa por mí, pero tiene que entender que la fecha está cerca y me afecta.

Simplemente suspiro y bajo mi mano con el cepillo de cabello en ella mientras me apoyo en el lavamanos.

— Sé lo que estás pensando, Lee, lo entiendo, pero no puedes descuidarte por eso. Ya han sido dos años, ¿Cuándo lo dejarás en el pasado? —Su tono de voz cambia, ahora es un tono bajo y calmo, comprensivo, pero a la vez firme.

— Es que no es fácil, Seokjin y lo sabes, tú también lo sabes porque te crió conmigo. ¿Cómo no te afecta? —lo miro con el ceño fruncido.

— No comencemos, por favor termina de alistarte y mueve tu trasero abajo porque se nos hace tarde —me dice, volviendo a su tono altanero y divertido, dejando el tema anterior a un lado.

Termino de peinar mi cabello, cepillo mis dientes y me maquillo. Ya tenía el uniforme puesto así que no hubo necesidad de cambiarme.

— ¡muévete, babosa!

— ¡Cómo me tratas de bien! ¡El más amoroso mejor amigo! —grito bajando por las escaleras.

— ¡Deberías pagarme! —me responde mientras me acerco a él— ¿Ya comiste? —niego con la cabeza— Pues qué triste, saca alguna fruta o lo que sea de tu refrigerador rápido y vámonos.