#Naked_Challenge_2 [JiCheol • One Shot]

#Naked_Challenge_2

Jihoon estaba bastante nervioso y tan concentrado en las palabras que diría en la presentación que daría en unas cuantas horas, que no podía concentrarse en lo que hacía. Al preparar el desayuno por la mañana, en lugar de colocar el azúcar al café y la mermelada a la tostada, lo hizo al revés; dio la vuelta para llevar los platos a la mesa y luego los cafés y llamó a su esposo. SeungCheol llegó un poco adormilado, era lunes y le costaba un poco más de trabajo levantarse temprano que los otros días; se acercó a Jihoon y le dio un beso en la frente para luego sentarse frente a la mesa y comenzar a desayunar.

—Mmm... Mi amor.

—¿Sí?— respondió por instinto, pero en realidad seguía sumergido en las palabras que había estudiado todo el fin de semana para la presentación.

—¿Por qué la tostada tiene azúcar?— ya le había dado un mordisco y si no fuese por el sabor simple, pero dulce, no se habría dado cuenta.

—Tiene mermelada como siempre— dijo y miró su plato, dándose cuenta de que realmente había azúcar en las tostadas —que raro, yo le puse mermelada.

—Mmh... El café tiene la mermelada— dijo con una ligera sonrisa al probar el café —tranquilo, va a salir bien tu presentación, haz trabajado en ello todo el mes, sólo necesitas decirles un resumen.

—¿Y si digo mal las cosas?

—No las dirás mal, sé que estás preocupado por el error que cometiste, pero estuviste checando cada mínimo detalle más de una vez y además practicaste conmigo y todo estaba en orden; ten en cuenta que también hiciste fichas y usaste resaltadores en las palabras que más olvidabas, ¡ya te lo sabes todo de memoria!— expresó con una reconfortante sonrisa —estás más que preparado para dar ese informe.

Luego del increíble sexo que habían tenido con fresas y chocolate, no pasó mucho tiempo para que Jihoon le dijese la razón por la cuál había pasado tanto tiempo en el trabajo en vez de complacerlo como al mayor le gustaba. Al principio fue difícil y hubo una larga discusión, pues Seungcheol se había enojado con él por no haberle comentado nada, porque ahora se sentía culpable por haberle exigido más tiempo junto a él y más tardes de sexo cuando Jihoon estaba tratando de rescatar su empleo, además de la falta de confianza al no haberle dicho en su momento; sin embargo, ya conocía a su esposo, comprendió sus razones y al final le hizo saber que tenía su apoyo en cualquier cosa que necesitase.

Así que la presentación que daría en unas cuantas horas, se trataba de la presentación decisiva, la que le diría si estaba despedido o si se quedaba. El error que había cometido se trataba de unos pocos números erróneos en uno de los registros de cuentas por pagar de uno de los clientes de la empresa; cualquiera pensaría que un número no hacía la gran diferencia, pero realmente lo hacía, ya que podían pensar que se estaba haciendo un fraude, e incluso la empresa para la que estaban trabajando podía quedar en bancarrota por ese error.

Aquellos números pudieron ser corregidos a tiempo cuando fue revisado minuciosamente por su jefe, pero aquello lo puso en un mes de prueba, no porque fuese un mal empleado, sino porque tenía menos de un año en aquel despacho y ese error hizo que su jefe desconfiara en él; por lo que ahora era de suma importancia que su concentración estuviese al máximo, así como el de todos los empleados. Aunque a él no le correspondía dar el informe de los resultados mensuales a los clientes, su jefe le había dicho que ese sería su "prueba final", debía dar una presentación clara y resumida para que el cliente entendiera cómo iba la contabilidad de su empresa.

Jihoon suspiró, su esposo tenía razón, pero no podía evitar ponerse nervioso y que los pensamientos pesimistas se apoderaran un poco de su mente —sí, tienes razón. ¿Quieres que vuelva a preparar el desayuno?