SHIRO YASHA

Capitulo 7

Nota: no soy dueño de Last Airbender o Gintama. ¡Por favor revise!

Advertencia: este capítulo es más extenso que los demás.

¡Disfrutar!

Capítulo siete: Impresiones y su importancia

Era bastante aterrador la frecuencia con la que pasaban sus días libres con el excéntrico hombre de cabello plateado cuando podían estar en las aguas termales o en algún otro edificio para relajarse y tomar un descanso de sus negocios. Pero de alguna manera ... este hombre confuso de alguna manera se había introducido en su deprimente y corta lista de amigos y se mantenía en esa lista con mano de hierro.

En realidad, eso fue en parte culpa suya, ya que encontraron que su amistad era un rayo de luz en comparación con las desgracias que habían sufrido tío y sobrino a lo largo de los años.

Zuko reflexionó sobre estos hechos y resopló mentalmente divertido mientras bebía su té. No era tan sorprendente para él en la actualidad, porque la compañía que Gin les ofrecía a los dos exiliados había aumentado gradualmente su relevancia en sus vidas de un mero conocido a... un miembro de la familia. Recordó cómo Gintoki se había tomado el tiempo durante las semanas que pasaron en Ba Sing Se para darle más instrucciones sobre cómo perfeccionar mejor su habilidad con la espada y su Control de Fuego, para su sorpresa; aunque su experiencia luchando contra Fire-Benders fue probablemente la fuente de su conocimiento.

A veces... el ex-Príncipe se había sorprendido pensando en el ex-Demonio Blanco como otro tío, incluyendo a Iroh como figura paterna principal.

Aunque preferiría trabajar en el circo que admitir sentimientos así.

Mirando al otro lado de la mesa, notó que Gintoki también había invitado a Katsura y Elizabeth a tomar el té. Era confuso cómo permitiría que los dos fugitivos del Reino Tierra se refugiaran en su casa cuando los Shinsengumi los perseguían activamente. Cuando expresó estos pensamientos, Gin rápidamente señaló que eso era lo que también estaba haciendo con los ex Príncipes. Afortunadamente para ellos, el día parecía progresar bastante bien, sin complicaciones.

Desafortunadamente, fue entonces cuando Murphy's Law decidió meter su molesta nariz en su negocio.

Kagura había sido enviada desde la mesa del comedor cuando repetidamente había intentado robar la comida de sus platos, y finalmente la detuvieron después de que logró devorar la mitad de la comida que descansaba en dicha mesa. Se había colocado en su exilio temporal junto a la ventana, con la esperanza de vislumbrar algo más para comer, o al menos, algo vergonzoso para sostener sobre las cabezas de su vecino como chantaje.

Fue entonces cuando vio algo bastante peculiar que se dirigía a su casa, listo para interrumpir el cómodo entorno de su hogar.

"¡Oi, Gin-chan! Hay un niño calvo que viene hacia nosotros; ¡y también está volando!"

Fue bastante desafortunado que ella dijera eso justo cuando Zuko e Iroh estaban tomando otro sorbo de su té, porque rápidamente salió de sus bocas mientras rociaban el líquido con sorpresa y alarma en los rostros desafortunados de sus anfitriones y compañeros invitados.

Por las experiencias que compartieron con los tres yorozuya y el hecho sólido de que ningún niño en ninguna de las tres naciones restantes era calvo o podía volar, no pasó mucho tiempo antes de que el resto de las personas comprendieran quién volaba hacia el negocio con dos fugitivos y dos ex miembros de la realeza dentro de la habitación. Con un rápido gesto con la cabeza y las manos diciéndoles que se escondieran, Gintoki se puso de pie y se acercó a la puerta principal para recibir a sus visitantes no deseados mientras sus cuatro invitados se refugiaban en el armario.