《ONE SHOTS, TYPES, TODO》《Stephen Amell/Oliver Queen》©

Oliver Queen

Título: Rescate. 2/2
OliverxLectora
Advertencia: Ninguna.

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Pov _________:

—¿Estás lista?

—Claro, ¿y tú?—dejé de mirar mi atuendo para verlo.—¿Qué tienes?

Anton suspiro mientras miraba a otro lado.—Nos quieren muertos.

—¿Qué?, ¿quién?—pregunte para caminar a él y sentarme a su lado.

—Frank, el mismo que nos pago para rastrear a Queen.—dejo de mirar su tablet para mirarme.—Cree que somos una amenaza y no quiere dejar cabos sueltos.

—¿Dónde lo oíste?—frunci mi ceño confundida.

—Hace unas semanas, antes de que "desaparecieramos" del mapa.

—Bien, entonces iremos juntos hoy.

Me puse de pie para tomar mis tacones negros, Anton me siguió de mala gana aunque ya iba bien vestido y lucía muy guapo.

Tan pronto llegamos al evento "Gala de recaudaciones para los Glades" vimos a todos los representantes de las familias más importantes de StarCity.

—Es extraño estar en la zona de batalla en lugar de estar en resguardo.—bromeó el pelinegro a mi lado, rodé los ojos divertida para tomar dos copas de champagne de la bandeja de un mesero y darle una.

—Relajate, mientras todo este en orden nada saldrá mal.—susurré para beber un trago de mi copa.

—Tienes razón.—bebió de su copa para relajarse al parecer, abrió sus ojos mirando detrás mío.—Hay un amigo-enemigo.

—¿Qué?

—3312...—susurró afligido.—Houston tenemos un problema...eh, ¿guion bajo, punto, guion bajo?—le mire confundida.—No, es tres puntos, tres guiones bajos y tres puntos.

—¿SOS?—asintió levemente.—¿Para qué quieres ayuda?

—Oliver Queen esta aquí.—me gire sobre mis talones para ver al mencionado en el pequeño grupo de periodistas, cuando nos miramos me sonrió y volvió a lo suyo.—Debemos alejarnos.

—Tienes razón.—tomé su brazo para alejarnos de aquel punto, nos adentramos cada vez más al salón.

—Oye...no me siento bien.—susurró tambaleando un poco.—El champagne traía algo.

Lo ayude a caminar hasta un pasillo, trato de mantener el equlibrio y antes de que surtiera efecto lo que sea que nos dieron saque de mi bolso una jeringa con un analgésico líquido que iba a contrarrestar los efectos. La clave en su brazo para inyectarle toda la solución viendo como respiraba más calmado.

—¿Te sientes mejor?—pregunté preocupada, él asintió levemente mientras se tomaba su tiempo para recuperarse.

Tome mi bolso para después sujetar la jeringa con firmeza cuando escuche pasos, después vi a un tipo apuntarnos.