Capitulo 1.-
Narras tú
Me desperté muy temprano, y no precisamente por la cálida luz de día, si no por los gritos de mi madre y el llanto de Annie. ¿!Qué!?, oh ¡mierda!
Tu: ¡Mierda! Es Annie..- me levanté de la cama y corrí hacia donde provenían los gritos, la habitación de Annie.
Kathlyn: ¡Por Dios! ¡Mocosa mal criada, ya estas grande para estar mojando la cama!. ¡¿Cómo es posible que seas mi hija?!.. -le decía a gritos a la pequeña.- Eres una... -la interrumpi, antes de que terminara.
Tú: ¡Pequeña! ¿Que sucedió?
Annie: ¡Hedmanita!.. -corrió hacia a mí.. - Me hice pipí de nuevo.. -me dijo sollozando.. - Y mamá dice que soy una adquedosa.. -yo mire hacia mi madre, que me miraba con desprecio.
Kathlyn: ¡Claro que eres una asquerosa, y que no sabe hablar!.. -me miro a mí.. - ¡Pero tú eres la puta culpable de todo...!.. -no podía dejar que Annie oyera todo eso..
Tú: Pequeña, ve a mi habitación, dormirás conmigo, anda ve.. -la deje en el suelo y le di un beso en la frente.. -Esperame allí ¿vale? Dame un minuto y estoy contigo... -Annie se fue y hable.. - Y tú madre te pediré que no trates a mi hermanita de esa forma, sólo es una pequeña de 6 añitos, a mi trátame como se te antoje, pero a ella tratala bien.. -le dije medio gritando, algo que detesto es que trate mal a Annalie.
Kathlyn: ¡¿Qué te crees puta barata?!.. -me tomo del cabello, y me dio una bofetada.. - ¡Esto es para que no olvides que la que manda aquí soy yo!..
Tú: Sí, como usted diga, ahora sueltamente, que tengo que ir a ver a Annalie.. -me safé bruscamente haciendo que se quedara con cabello mío en su mano.
Kathlyn: ¡Deja de mal criar a esa mocosa!
Tú: Deja de gritar, por si no lo recuerdas esa mocosa se llama Annalie, y es TÚ HIJA, deja de tratarla como si fuera cualquier cosa.. -realmente estaba muy enfadada
Kathlyn: Blah, Blah, Blah, eres una zorra que no respeta a nadie, soy tu madre y me debes respeto.
Tú: ¡Ja! Ahora esta "zorra" es tu hija, deja de fingir, y deja de gritar, vas a despertar a esas otras 2
Kathlyn: ¡A ellas ni las nombres, ellas si son unas señoritas!
Tú.- ¡Ja! Sí, sí, como no.. -me di la vuelta y me dirigí a mi habitación dejándola sola, dijo algunas maldiciones, eso creo, la verdad no me interesa.
Abrí la puerta de mi habitación y no estaba Annie en la cama.
Tú: Pequeña, soy yo, ven, sal del baño... -de a poco se comenzó a abrir la puerta del baño, dejándole ver su ondulada cabellera, me vio, y corrió hacia mí, al instante me agache a su altura.. - Cariño ¿Qué pasó?
Annie: Me hice pipi, y mamá me deto.. -dijo llorando.
Realmente me parte el corazón en mil pedazos verla llorar, la apegue a mi pecho..
Tú: Ya cariño, todo va a estar bien, yo estoy aquí, y no dejare que nada te suceda, ahora iré a buscarte un pijama.
