Capítulo 53.

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Había pasado prácticamente dos semanas desde que el alfa de cabellos negros apodado por muchos "segundo lugar" había sido ingresado al famoso hospital por sus graves heridas que poco a poco estaban sanando con la ayuda de enfermeras y medicinas. Tal vez para algunos alfas esto que le había pasado a Jean hubiera sido un duro golpe a su orgullo y de ahí este tomaría venganza por quien le había hecho eso pero no fue así por alguna extraña razón Jean ya no quería tomar venganza ya no quería perseguir a su ex esposo aunque su alfa gruñera por retar y tomar venganza. En esta ocasión él no quería hacer nada de eso y tal vez la razón era porque aquel alfa que lo dejo asi no era de este mundo y solo podía decir por instintos que esa persona era más inteligente y más cruel que él. Porque aunque no lo admitirá Jean sabía que había hecho mucho daño a su ex omega y a otras personas durante su vida y aunque no sentía remordimiento sabía cuándo dejar las cosas para no salir él perdiendo y estar tranquilo. Bueno o eso quería pensar si no fuera porque en aquel momento la puerta de su habitación se abrió dejando pasar a cierta persona que no quería ver.

— ¿Qué haces aquí? — Dijo entre dientes, sin importar el dolor en su cuerpo se sentó sin dejar su mirada de aquel individuo.

— Es muy obtuso de su parte ser tan hostil conmigo. Recuerden yo solo seguí ordenes jefe Jean.

— No me interesa lárgate de aquí, ¿A qué has venido?  Vas a seguir engañandome para seguir con tu jueguito, tú y tus cómplices — Gruñó con sarcasmo soltando una pequeña carcajada amarga.  Aquella persona solo pudo reír sin ataduras mientras después de unos segundos retomar la conversación ya que Jean no iba soportarle más al tener su mandíbula tensa y solo esperar un movimiento para saltarle encima sin importar que estuviera débil y herido.

— No he venido a engañarte Jean, he venido porque quiero que me confirme algo.

Jean levantó una ceja sin dejarse intimidad. El ambiente estaba muy espeso y aunque los dos estuvieran en ese ambiente ambos siendo alfas se pudieron contener.

— Habla y después de eso quiero que te largues no quiero tener nada que ver contigo, un perro con un dueño retorcido.

— Está bien, ¿Dime es verdad que ese ex omega tuyo si es mordido hará lo que se le orden? Su sumisión será garantizado si se le muerde.

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— Waou es sorprendente ver a un omega tan fuerte como tú en estos días siendo que los omegas solo son tiernas criaturas y bonitas cositas.

El gobeteo de sus puños dándole al pobre saco de boxeo se detuvo haciendo que por fin el omega pelinegro voltearse al ver al alfa que mostraba aquella sonrisa cuadrada que a lo poco nunca le llegó a gustar al menor.

— ¿Puedo saber cómo es que me encontraste, alfa acosador o debo decir  piensas secuestrarme de nuevo? — Preguntó el omega con aparente tranquilidad, sacándose sus guantes de boxeos y con una mano  llevar sus cabellos negros  hacia atrás, desmostrando su belleza nata apesar de haber sudado por el entrenamiento que estaba haciendo hace minutos.

— Quisiera...—Lameo sus labios inferior mirando el cuerpo del omega de arriba a bajo para negar dándole algún escalofríos en la espalda al omega pero no sé hizo notar— Pero no, como ya dije eso fue un encargo del señor Jean y para su información ya no trabajo para él, solo puedo decir que esto es una bella casualidad — Se encogió de hombros para seguir su camino pasando al omega y tomar unos guantes y colocarselos sonriendo otra vez con aquella sonrisa cuadrada — Como tú vine solo a entrenar —Aclaro y sin más su atención fue a parar al saco a lado del cual el omega había estado prácticando para comenzar con varios golpes.

Por otro lado, Yuuri solo pudo hacer una mueca sin interés tomando sus cosas para salir de ahí. No era como si de ahora en adelante se iría a encontrar con ese raro alfa secuestrador todo los días, porque si para el omega ese era su último día en ese gimnasio ya que en estos meses debía dedicárselo a su rutina y a su...¿Alfa?

Aquel pensamiento para el omega era nuevo y aunque con solo decir "su alfa" su corazón latía un poco más rápido de lo normal la culpa solo se lo echaba a su omega interior y tal vez un poquito a el efecto que hacía Víctor en él solo porque ahora ambos era novios.

Después de unas horas Yuuri había llegado a su casa, se dio un baño y fue a sentarse en el sofá al ver una película. Para ese momento Maritza ya se había ido y él tenía toda la casa sola pero en ese momento su teléfono vibro anunciando una llamada de su mejor amigo Phichit para contestar de inmediato.

— Phichit...

— ¡Yuuri! ¿Vamos mañana al cine? Tengo que contarte cosas.

— Jaja bueno ¿A que hora?

— A la 9 am

— Está bien ahí estaré — Colgó.

[°]


Para ese momento Víctor se sentía muy feliz. Todos sus planes que algunas vez fueron fallidos comenzaba a dar frutos y todo era tan feliz cuando su alfa Interior se sentía muy a gusto con su omega. Porqué quien no se sería feliz si al fin podía estar con su pareja destinada, la pareja quien le dio su luna. Aunque Víctor no era de creer esas historias al vivirla la acepto y estaba feliz. Sin embargo, nada podía ser color de rosa y Víctor lo sabia siempre  habría cosas que se debía solucionar ya que Víctor tenía algunos asuntos que resolver aún y debía hacerlo antes de pudiera presentar a Yuuri a su familia. Porqué si, el alfa quería corteja a su omega correctamente.

Continuará...

N/A: Cortito pero con un significado

¿Quien quiere hacerle daño a Yuuri?
¿Jean hablara?
¿Que asunto Víctor tiene que resolver?
¿Yuuri conocerá la familia de su alfa?
¿Acaso ellos será feliz juntos?

Todas esas preguntas será respondidas en los siguientes capítulos.

Espero que le guste♥️

Kata.

Omega fuerte [VictorxYuuri]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora