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¿Un alma rota puede seguir viviendo?

¿Cuáles son tus metas? ¿En cuál escuela estudiarás? ¿A qué vas a dedicarte? ¿En que piensas trabajar? ¿Cuáles son tus planes para tu futuro?

Esas preguntas me tienen hasta la madre ¿por qué? Siempre es el tema de conversación y nunca se que contestar

Veo a muchos otros planear cuidadosamente cada momento del resto de sus vidas como si pudieran controlarlo todo y me pregunto ¿qué hay en el mundo que valga la pena el esfuerzo?

Aunque es algo gracioso recordar que no hace mucho yo era igual, me gusta pensar que soy uno de los elegidos para ver la crueldad de este mundo loco, si no fuera por eso seguiría preocupado por sueños inalcanzables y planes vacíos

De pequeño siempre me esforcé por cumplir las espectativas de todos, si sacaba un diez y papá me felicitaba mantendría ese diez, si mamá me enseñaba a cocinar recordaría cada paso e ingrediente, si mis amigos me vitoreaban por saber esgrima me convertiría en el próximo *Podzniakov de ser necesario

Pero jamás quise ser "especial" ni sobresaliente, sólo no quería decepcionar a nadie, sin embargo pronto mal acostumbre a todos a mi alrededor a pensar que yo era capaz de hacer todo a la perfección sin esperar una sola palabra de ánimo

Pensé que podría seguir con esa máscara de niño prodigio hasta el fin de mis días pero la presión crecía a cada segundo, comencé a tener problemas de salud desencadenados por estrés y me sentía aún peor al esconderlo de mis padres cuando me preguntaban que me estaba pasando, no tenía el valor de decirles

Así fue el pasar de meses llenos de angustia, hasta que un día llegó un momento de claridad: ¿Quién soy yo? ¿Qué es lo que YO quiero hacer?

La inminente bomba de emociones reprimidas finalmente explotó, estaba cansado de aparentar ser algo que no era y comencé a actuar como realmente quería hacerlo, sin pensar en terceros

Pronto mis padres notaron mi radical cambio de actitud y decidí contarles todo, absolutamente todo. Jamás esperé la reacción que me dieron

"¿Sólo era eso?"

Obviamente dijeron más cosas para consolarme pero esa primera oración me dejó pensando, ¿son mis sentimientos tan banales que los minimizan de esa forma?

Al ya no estar restringido por el que dirán entré en lo que mis padres llamaron "fase rebelde" aunque no me importaba, era libre y eso era suficiente

Obviamente tuve muchas otras pláticas con mis padres pero siempre terminaban en desastre, mi padre quería dejarme ser y hacer lo que quiera mientras sea joven mientras que mi mamá estaba más preocupada por el futuro que planeó para mi

Creí haber salido de mi jaula al mostrar mi verdadero yo pero terminé entrando en otro tipo de prisión, el mundo se basa en causa y efecto después de todo. Ahora era un "fracasado sin futuro" pero ya no importaba realmente, soy como soy y jamás cambiaré para complacer a alguien más

Con el tiempo mis padres me "recomendaron" ir a un Grupo de Apoyo, tal vez creyeron que tengo depresión o algo así, fuí más que nada por curiosidad, nunca sabes que tipo de gente puedes encontrar en tu camino

El anfitrión llegó tarde para variar, miré a mi alrededor pero un chico captó mi atención, se notaba algo incómodo así que comencé una plática con él, no creí que nos entenderíamos así de bien, ¿será él otro de los elegidos para ver la crueldad de éste mundo loco?

Sólo se su nombre, Ja'far. Espero que venga a la siguiente sesión esta vez le pediré su número, realmente quiero verlo pronto

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*Podzniakov es un famoso esgrimista ruso*

¡Después de dos meses por fin saqué la segunda parte 😅!
Lo lamento, trataré de actualizar más seguido
¿Qué les pareció?

¡Gracias por leer!