¿por qué nos odia?

Linda noche I

Narra Freddy

Alan entro en pánico desde que le dijimos que le toca compartir cuarto con Ara, dice que el nota que ella quiere más pero como él siempre es demasiado planeador para todo no quiere hacer algo mas con ella, nos ha rogado a todos que alguien más duerma en ese cuarto pero ya todos nos negamos, incluso su cuñado; y lo digo porque cuando vimos que regreso su cuñado le dio un codazo amigable y le dijo: ya están ambos avisados, lo que quieran hacer es cosa suya, y sin más se fue al cuarto que comparte con su novio.

Alan estaba completamente pálido pero algo nos estaba extrañando y así que fue que mediante una patada en la espinilla reacciono y fue a ver a Arantxa, nosotros nos quedamos en la sala para ver que pasara porque ya era muy noche y aunque la estábamos pasando bien tendríamos unos días muy largos, tenemos que planear lo que va a pasar en la escuela y ver qué es lo que vamos a hacer pero bueno esperemos poder descansar.

-Amor, ¿no quieres ir a preparar unas palomitas para hacer noche de películas?- Bryan no respondió solo me dio un beso y se fue a la cocina.

Narra Arantxa

Yo seguía metida en mis pensamientos cuando note que alguien estaba detrás de mí, no cerca pero si lo suficiente para notar su presencia, voltee y vi al hombre más maravilloso del mundo parado ahí viéndome fijamente con una cara de preocupación que a cualquiera espanta, mi primer reacción fue preguntarle si estaba bien y el solo emitió un sonido para afirmar, después de unos segundos dijo que se había enterado que compartiríamos cuarto, me reí un poco, me acerque y le di un beso en la mejilla y volví para secarme las manos por lo mojado de lavar los trastes, volví a acercarme y lo abrace del cuello y note como él me tomaba de la cintura, por fin hable.

-¿te molesta que durmamos juntos esta noche?

*Claro que no es eso cariño, es solo que... -tardo unos segundos en hablar -te deseo y mucho –su mirada se concentró en algún punto de la cocina, evitado verme -pero no quiero arruinar nuestra primera vez juntos –me pego más a el- no quiero solo dejarme llevar por un impulso.

Se quedó callado, y fue cuando note que Bryan caminada hacia la cocina, me separe de Alan y tome su mano para así caminar al cuarto donde dormiríamos hoy, el dudo en entrar pero siguió caminando atrás de mí.

-solo quiero platicar sin interrupciones ¿ok?

*ok

-Amor yo sé que siempre has querido que todo en nuestra relación sea perfecto –me senté en la cama y él se sentó a mi lado, tenía unas ganas inmensas de subir mis piernas en las suyas como siempre que nos sentamos juntos pero me controle puesto que realmente necesitamos hablar- ¿Amor mírame sí? -gire con una mano su cara hacia mi mientras juntaba sus manos con la que tenía libre, el volteo y se veía nervioso- mira realmente todo es perfecto en esta relación y te agradezco infinitamente que siempre busques complacerme con todo lo que haces, solo que quiero que sepas que te deseo –el intento hablar pero puse mi dedo índice en sus labios y proseguí- sé que tú también a mí y también sé que tú quieres que también nuestra primera vez sea perfecta pero créeme que lo será si lo haces con un cuarto del amor que siempre me demuestras, yo no necesito un camino de rosas y velas aromáticas hacia la cama y de fondo una canción romántica –era un tanto obvio que algo así planeaba porque al terminar él se relajó bastante, como si dejara caer un peso muy grande de sus hombros- mi amor entiendo que si sería mi primera vez y quiero que seas tú quien me quite la tan famosa virginidad –él se tensó, creo eso no lo sabía pero no me distraje y continúe hablando- si amor, soy virgen y anhelo que seas el primero –es ahora o nunca, suspire y deje salir las palabras que tenía atoradas en la garganta desde hace mucho- amor no sabes las ganas con las que me dejas después de besarnos, quiero más y más de ti, sin embargo si tú quieres esperar yo lo entenderé, podemos solo dormir abrazados si eso quieres –una lagrima rebelde cayo por mi mejilla, yo estaba dispuesta a levantarme hacia la ventana pero una mano me detuvo.

*mi amor perdóname –cuando menos lo note sentí los cálidos brazos de Alan envolviéndome en un cálido abrazo que rápidamente correspondí, para este punto ya había subido mis piernas en las suyas- perdóname por creer que tu necesitabas de todo eso para estar conmigo, es solo que eres la primera persona de la que fielmente me siento enamorado, no quería que mis ganas de tocarte te alejaran de mí, no soportaría perderte, no a ti -note lo mucho que le dolió decir esas simples palabras pero no dije nada y solo me limite a escucharlo-, lo único que quiero es verte feliz y creí que no era suficiente para hacerte feliz

A este punto ambos ya estábamos llorando, me separe de él y nos miramos a los ojos, de verdad que tiene los ojos más lindos, amo verme reflejada en ellos, al verlos la paz regresa a mí.

-Alan no necesito nada más que a ti y tu amor, con eso me haces ser la mujer más feliz del mundo –no lo deje responder y lo bese, es uno de esos besos lentos que ambos necesitábamos, dentro del beso sentí que todas mis dudas se iban, es el, él es el indicado. Nos separamos, el limpio los rastros de lágrimas que quedaban en mi cara y me sonrió.

*te amo Arantxa, te amo con todo mi ser, y no me importa que seas o no virgen, te amo, quiero hacerte la mujer más feliz del mundo y también quiero hacerte llegar a las estrellas y saber que eso lo provoco yo, así como solo tú me puedes causar que mi corazón se acelere o se detenga al mismo tiempo.

-Te amo Alan te amo mucho, de verdad que me haces muy feliz, un simple beso tuyo me hace estar en paz.

No sé cómo nos pusimos de pie y me abrazo de la cintura mientras yo lo hacía de su cuello, de pronto comencé a girar, él me estaba cargando y reíamos de ello, cuando me bajo me dio la mano y salió rumbo a la cocina, yo iba tras el sin saber que haríamos, al llegar me dijo que si quería hacer unas malteadas y yo acepte como toda buena niña chiquita, el saco todo del refrigerador y notamos que ya todos los chicos estaban entrando a la cocina. Era obvio que escucharon de los antojos de mi novio.

-¿Alan nos vas a invitar o solo serán ustedes dos? –dijo Freddy y todos empezamos a reír.

*les daremos pero ya no hay crema batida ni mucho hielo así que me vas a acompañar a comprarlo, todos volvimos a reír, Alan se acercó a mí y me beso para luego irse con Freddy a la tienda, mientras los demás nos poníamos a preparar las malteadas con lo que teníamos en la cocina.