Me parece increíble como el paso del tiempo nos consume, como las historias suelen ser olvidadas dando paso a nuevos acontecimientos sin saber su desencadenate, tal vez solo deseando ignorarlo. Los días pasan tan rápido como los rostros, nombres, voces, sangre, carne, ojos, te das cuenta que todo cambio por el ambiente de las situación, cuando el sentimiento no se encuentra asfixiando hasta la mas mínima gota. Recuerdo muchas cosas, escondemos secretos de legados que desaparecieron, las respuestas perdidas de las preguntas más ansiadas, el poder atosigante que logra hacer delirar a quien lo pruebe.
A veces pude replantearme como acabaron las circunstancias de esta manera, como si todo lo que hubiéramos hecho no sirviera para nada. Sabíamos que la vida era como un juego de ajedrez, los movimientos debían ser precavidos, observar las diferentes piezas creando jugadas múltiples que abrirían mas de una puerta. Diría que sospechaba que su presencia ocasionaría caos, colisionaría aquello que nos costó tanto restaurar siendo lo más preciado para nosotros, mi responsabilidad se basaba en mantener el control de las cosas, proliferar una paz que calmaría los instintos injuriosos de los depredadores de nuestro alrededor, aun si eso implicaba mostrar la otra cara.
Desde mi punto de vista nuestra familia siempre fue algo inestable, considerablemente nos era una tortura estar presente en sus desvarío inoportunos, las acciones eran la condena que llevaríamos al cuello toda nuestra existencia sin descanso alguno, era cargar con más de una vida sobre nuestra espalda, la angustia que cerraba la garganta y/o simplemente el cansancio que daba paso a lo más interno de nuestro ser. Puedo mencionar las catástrofes históricas que fueron sucediendo ante nuestros ojos; enfermedades, muertes, guerras, persecuciones ilógicas que desprendían un aroma a ironía dado el objetivo que era cazado con paranoia, desinteresados en las verdaderas causas. No es para nada fácil dejar este registro con toda la información que contiene, sin embargo, es necesario para que entiendas que realmente nadie se los esperaba, hasta puedo decir que vos tampoco al no ser consciente de lo que la imaginación pudo lograr de manera inesperada.
La mente humana siendo tan sorprendente, creando, restaurando, destruyendo sin parar, miles de pensamientos, sensaciones, información, deseos pasan en segundos. El interrogante principal es "¿A dónde va todo aquello que imaginamos?, ¿Lo olvidado donde desaparece?" esas son las cuestiones que vas a obtener cuando vuelvas, espero que puedan saciar tu ilimitada, ambiciosa y peligrosa curiosidad. Se que va a ser tedioso el que todo en tu vida cambie de la nada, vas a enojarte, llorar, odiarme, quizás en el fondo guardes un poco de cariño hacia mi persona. Lo último que puedo expresarte antes de plasmarlo todo en hojas amarillentas, viejas, arrugadas y manchadas como un otoño lúgubre es el hecho de que tengas que asumir las consecuencias de tus actos, la horca espera al culpable, el vástago cortar cabezas, el fluido espeso vuelve a manchar las paredes dañando las cuencas desoladas por tu ida, es inevitable lo escrito en los libros que marcaron el destino. El camino de los supuestos pecadores fastidiados por burdas ideologías, la parca espera el reencuentro fugaz con la sonrisa marcada.
Suerte es poco lo que te dedico en esta desdicha.
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No toques mis amapolas
Spiritual"A veces sin querer la curiosidad de uno va mas allá de lo planeado."