✔︎𝗛𝗶𝘀𝘁𝗼𝗿𝗶𝗮 𝘁𝗲𝗿𝗺𝗶𝗻𝗮𝗱𝗮✔︎
Inuyasha es el hermanastro de Sesshomaru , lo odia o mejor dicho , lo odiaba .Porque después de una batalla contra los lobos pierde la consciencia y pierde la memoria.
solo sabe que su única familia es Sessho...
- Los suaves pasos le dieron a entender que su hermano se estaba acercando y como siempre con esos pasos elegantes y despreocupantes a la vez , era una buena combinación que solo Sesshomaru podía hacer a la perfección.
- Habían pasado algunos días desde lo ocurrido y ahora las cosas estaban raras por así decirlo , uno no hablaba con el otro aunque en dos ocaciones el que había hablado era InuYasha haciendo preguntas sobre lo de su brazo y Sesshomaru escabulló olímpicamente para no hablar del tema , Hoy era el día indicado , eso es lo que había dicho Sesshomaru en su mente , le había dado muchas vueltas al asunto y no tenía nada que perder.
- La pregunta de su padre siempre estaba presente en sus recuerdos y este siempre tenía la respuesta " yo no tengo a nadie a quien proteger" y siempre mantendría esa respuesta porque no había nadie que le hiciera cambiar de opinión. ¿Verdad?
- Los pasos cesaron y la puerta fue abierta abruptamente dejando la figura de Sesshomaru al lado del marco de la puerta.
- ven conmigo - fue lo primero que dijo con su voz suave y su mirada penetrante , una linda combinación a la cual se fue acostumbrando InuYasha el cual ahora se encontraba con el cabello negro , sus garras habían desaparecido Y sus lindos ojos amarillos se habían convertido en un lindo color negro.
- En el cielo solo se podía contemplar las miles de estrellas y es que parecía que la luna hubiera desaparecido , ocasionando este cambio en el ser híbrido:
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- Y era que por esto estuvo encerrado todo el día en su cuarto sin querer salir a comer siquiera y es que sin saber porqué estaba avergonzado , no tenía ningún tipo de rencor hacia los humanos pero se sentía extraño sin sus garras sin esas fuerzas que Solía sentir con tan solo mover un dedo.
Se levantó siguiendo los pasos de Sesshomaru , y no fueron muchos por el simple hecho que se adentraron al cuarto de el más alto , lo miró desconcertado sin entender a qué se debía esta invitación pero al ver la mesa bien repleta de comida deliciosa que parecía llamarle su estómago no se resistió y emitió un sonido haciéndoles entender a los dos presentes que tenía hambre. Mucha hambre.
- come - dijo Sesshomaru viendo las estrellas a través de la ventana mientras estaba apoyado en la pared.
- gracias - susurró agradecido y es que de verdad sólo estaba esperando a que terminara este cambio y se haría a devorar todo lo que se encontrara comestible. Se sentó en el suelo y empezó a devorar la carne y las frutas dejando de lado el arroz pero no por mucho tiempo ya que después se lo comió haciendo que algunos granitos de estos se le quedaran pegados en la comisura de sus labios.
Simplemente , tierno.
Aunque Sesshomaru estuviera de espaldas con el rostro levemente alzado y la vista en el cielo , también estaba atento a cada movimiento hecho por el ahora humano, se le hizo un poco extraño verlo de esta manera pero no por mucho tiempo ya que después solo no podía despegar los ojos de ese cabello negro , la mirada oscura como el cielo nublado...
Cuando terminó de comer no supo que hacer así que solo se quedó sentado.
- Gracias por la comida - dijo jugando con sus manos aunque se le hizo un poco difícil ya que solía jugar con sus manos y garras las que ahora eran unas uñas normales.
- no debes - respondió el peligris.
- ¿Qué es lo que no debo? - preguntó frunciendo el ceño.
- no debiste quedarte encerrado , eres híbrido y es normal que esto te pase - respondió bajando la mirada chocando con la de una avergonzada de InuYasha. Este asintió sin saber qué decir más.
Estuvieron por unos largos minutos con un silencio , pero no uno cualquiera si no con un silencio cómodo. Hasta que Sesshomaru lo rompió diciendo lo que nunca pensó decir.
𝒒𝒖𝒊𝒕𝒂𝒕𝒆 𝒍𝒂 𝒓𝒐𝒑𝒂.
- ¿Q..Que? - susurró abriendo los ojos de sobremanera.
- perdiste , ahora cumple - habló como si nada dejando sus dos espadas encima de una mesa de madera que estaba en la esquina de la habitación.
