Sentimientos fáciles de escribir pero difíciles de admitir. / By Ariadna Díaz

Sin destinatario ni remitente, solo al aire... 🌬️

Para ti mi querido y amado aire, porque aunque merezcas ser nombrado, el mundo no sabrá quién eres, solo quedará entre tú, mi aire y yo. 
Esto es para que sepas lo mucho que te amo, cuanto me importas, todo lo que provocas en mi. Debo de confesar que aunque no te pueda llamar como mi corazón y cerebro dictan; mi alma dice a gritos lo que mi boca se niega a confesar por miedo a que hullas, por miedo a no tenerte nunca más. Quiero que sepas que aunque no te tengo a mi lado, todo el día te materializas en forma de recuerdos, sonidos, hasta ese olor tan característico que desprendes...
Si alguien me pidiera que te comparara con algo que me conforma, indudablemente diría que eres mi sangre, el porqué es sencillo; porque eres la sangre que sube y se acumula en mis mejillas cada vez que escucho tu nombre, la sangre que me recorre de pies a cabeza y que hace que mi corazón palpite y acelere cada vez que te acercas a mi.
Tú, mi aire, aquel que me ayuda a vivir pero que también me destruye un poco cada día; eres eso que tengo pero no me pertenece solo mi, porque alguien más ya te respira.
Creo que soy la única que a querido estudiarte a fondo y aún no te das cuenta de ello y no te culpo, supongo que aún no estás listo para comentarte en lo que hago por ti. Tengo la esperanza de que en algún momento tú me respires de la forma en que yo lo hago. Se que la mayoría dice que el aire no tiene sabor u olor; pero tú mi aire, eres diferente, ya que eres TÚ, sin importar que te parezcas a muchos para mí eres solo tú, no existe nadie más para mí.
Siempre te respirare como el primer día en que te vi mi aire. 💜