IT HURTS (Niki)

"it hurt"

Todo se encontraba a oscuras, su habitación, su me mente y se podría decir que su corazón.

Había pasado casi un día desde lo sucedido, y simplemente no tenia ganas de seguir.

¿Por qué seguir si su angelito no estaría a su lado?

Porqué intentar ser feliz, si toda su felicidad simplemente se esfumó cuando su pequeña razón lo dejo.

No podía, simplemente no podía.

Lo único que hacia era llorar, llorar pensando en su angelito;

En sus ojos, los que miraba una y otra vez sin logran no perderse en ellos.  

Su sonrisa, la más hermosa de todas y de la cual le encantaba ser el causante. 

Su nariz, que se ponía roja cuando hacia frio pero siempre tan linda como él.

Sus labios, los que alguna vez probó y de los cuales era adicto. 

Sus cachetes, los que amaba pellizcar a su antojo para luego besarlos. 

Su cabello, el cual sin importar el corte lo seguía haciendo ver hermoso.

Sus manitas, y la forma en la que encajaban como si fuesen una sola al unirlas.

Sus piernitas, que servían como halmoada en cada una de sus conversaciones.

Sus abrazos, en los que buscaba consuelo cuando se sentía mal.

Cada mueca o reacción que tenia, porque le parecían las más dulces de todas.

El como daría todo para ver feliz a los que quiere.

Todo de él, simplemente todo.

Amaba cada una de las cosas que tenia para entregar, sus sonrisas, sus acciones, su personalidad, todo.

Y eso dolía más.

Porque se encontraba tan perdidamente enamorado, porque entrego todo a su pequeño angelito, quien simplemente se fue.

Porque aun sabiendo que no es cierto, se sentía culpable, y eso lo destruía aun más. 

No podía, ya no daba más.

Y en eso su teléfono sonó. Pero no hizo nada y solo lo dejo seguir sonando.

Sabia quien era, la única persona que lo llamaba para ver si había comido algo, o simplemente cerciorarse de que no se haya ahogado con su propio llanto. Y ese era K, quien se preocupaba por él aun sin tener la obligación de hacerlo. 

Y de nuevo su teléfono empezó a sonar, así que estiro su mano y lo agarro para luego cortar la llamada.

No quería hablar, no quería hacer nada.

Pero hay estaba de vuelta insistiendo y esta vez contesto, mas se quedo callado.  

–joder Niki deja de hacer eso– No dijo nada y solo siguió mirando al techo.

–¿podrías decir algo al menos?– nada solo el silencio y el resoplido proveniente del otro lado de la línea.

–¿comiste algo?– Y la típica pregunta la cual no quería contestar.

–¿Siquiera me estas escuchando?– Y no, la verdad no, su mente no podía prestar atención a algo más de dos segundos porque los recuerdos lo golpeaban como si fuese el saco de boxeo de sus pensamientos.

Algo exagerado, pero así lo sentía él.

–no me obligues a ir para hacerte hablar porque sabes que lo haré–  Se dio la vuelta dándole la espalda al teléfono aunque sabia que K no lo veía.