Don't forget me

Capítulo 3

El comedor era amplio, muy amplio. Había un montón de mesas repartidas por toda la sala. Al final de esta, había una barra en la que, las cocineras, iban poniendo la comida en las bandejas según ibas abanzando. Encima de la barra, había un enorme relój que marcaba las siete y media.

- ¿A qué hora cierran el comedor?- Pregunté.

- A las ocho cierran la barra donde sirven la cena.- Contestó Lauren mientras me tendía una bandeja.

Fui observando según abanzaba los alimentos que había al otro lado de la barra, no es que fuesen de restaurante pero, la verdad, no tenían muy mal aspecto.

Una vez habíamos cogido cada una nuestro filete y ensalada de pasta, nos sentamos en una de las mesas redondas que había.

- ¿Aquí está bien?- Me preguntó Lauren después de sentarse.

- Si, que mas da.- Dije copiando el acto que segundos antes acababa de realizar la castaña.

Comimos en silencio hasta que una sombra se paró frente a nostras.

- ¿Podemos sentarnos con vosotras?- Dijo el chico rizado que, según Lauren, tenía buen culo.

- Ya te has sentado, que remedio.- Dije con sacasmo mientras Lauren se limitaba a sonreir como una idiota.

- Por lo que parece sois nuevas aquí, ¿no es así preciosa?- Dijo esta vez un chico de pelo moreno y corto.

Le fulmine con la mirada y seguí comiendo.

- Parece que os ha comido la lengua el gato.- Solto el rizado tras una carcajada que solo le copió uno de sus dos amigos.

- Si, somos nuevas, las dos.- Respondió Lauren con la misma sonrisa de idiota apoyandose sobre las palmas de sus manos.

La chica comenzó una animada conversación con el rizado y el otro chico moreno de la que yo me excluí, al igual que el otro chico restante. Era rubio, de ojos azules, y se limitaba a comer lo que había en su plato, al igual que yo, sin decir la mínima palabra.

Miré el gran relój, eran las ocho y veinte, la barra hacía un rato que había dejado de servir cenas, yo me limitaba a jugar con el extremo de la funda de mi móvil.

- Lauren, me voy a ir subiendo a la habitación creo que no me encuentro bien.- Le dije a la chica que se situaba a mi lado.

- ¿Qué te pasa? ¿Te encuentras muy mal?- Preguntó alarmada.

- No, no, solo me duele la cabeza.- Mentí. - Tú quedate si quieres, ya nos vemos luego.- Dije levantandome del asiento.

- Creo que yo también me voy, mañana tengo partido.- Añadió el chico rubio.

Me despedí de Lauren y salí, trás el rubio, del comedor. Ambos fuímos hasta el mismo ascensor y, una vez dentro, cada uno pulso el piso respectivo.

Había un silenco incomodo, quería salir ya de allí. - Soy Niall.- Dijo el rubio rompiendo el silencio. Clavé mi mirada en el y asentí.

- Yo Alice,- Le conteste. - Aunque por ser el único que me ha caido bien de tus amigos puedes llamarme Liz.- Y le sonreí.

El chico me devolvió la sonrisa y las puertas del ascensor se abrieron indicando que había llegado a mi planta.

- Ya nos veremos por aquí.- Se despidió antes de que las puertas se cerraran. Sonreí para mi y me encaminé a mi habitación.

Una vez me había puesto ropa mas cómoda, me había lavado los dientes y cepillado el pelo, puse la clave del wifi en mi móvil y,  cuando se conectó, miré los mensajes de whatsapp que tenía acumulados.

Beth - 3 mensajes.

Tía Jenn - 2 mensajes.

Robert - 7 mensajes.

Abrí la conversación de Beth para responderla. Beth era la única amiga que tenía desde siempre, era la única que, tras la muerte de mi padre, seguía junto a mi. Después de leer sus mensajes y responderla, leí la conversación de mi tía Jenn, la única persona de mi familía que merecía la pena junto con mi padre. La respondí y, antes de pararme a leer los mensajes de Robert eliminé su conversación. Este tío era pesadísimo, no entendía un lo hemos dejado y el me voy a Irlnda, no vuelvas ha hablame, solo sabía molestarme.

Tras una medía hora en la que escuché música y hable con Beth, la puerta de la habitación se abrió dejando pasar a una sonriente Lauren.

- Ya estoy aquí.- Dijo quitandose la chaqueta y descalzandose.

- ¿Qué tal con el rizado?- Dije poniendome recta sobre la cama.

- Se llama Harry, y es un amor, nos ha invitado a ir mañana a almorzar con él y sus amigos.-

La mire curiosa, seguía con la misma sonrisa en la cara con la que la había dejado en el comedor hacía un rato.

- ¿Te ha invitado?- Le pregunté.

- Nos ha invitado.- Me corrigió. - Me ha dicho que, aunque tienes caracter, pareces buena gente.-

Hice una mueca y me volví a dejar caer sobre la cama.

- ¿Y tú que tal con el otro chico? Era igual de callado que tú.- Preguntó mientras se cepillaba el pelo.

- Ha sido un viaje en ascensor precioso.- Dije en tono de burla. Lauren negó con la cabeza mientras sonría. - Se llama Niall.- Añadí sonriente.

- ¿Y ya está?-

- Estamos en un segundo piso, ¿te crees que da tiempo a hablar de algo?- Dije mirandola, esta vez, seria.

- Asi que Niall ¿eh?- Negué con la cabeza y gire sobre mi misma apagando la luz.

- Buenas noches.- Añadí tapandome con la colcha da la cama.