𓄹 - 𝐓𝐇𝐑𝐄𝐄 ❜

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El peligris observó a todos, se notaba el miedo en sus rostros. Al ver que nadie actuaba rápido volvió a gritarles.

- LARGO AHORA. - casi casi parecía un rugido y con eso; la familia no tuvo más de otra que salir corriendo.

- ¡Cuando nos volvamos a encontrar te mataremos! - gritó el hombre del vendaje mientras salía de la cabaña con ayuda de su esposa.

Taehyung solo soltó una risa burlona y regresó con Jungkook.

- Adelante, mi señor. - se inclinó a manera de mayordomo lo que le saco una sonrisa al otro.

Jungkook entró con su cachorro en brazos - Lo lograste. - siguió adelante hasta la chimenea.

- Ja, ¿pensaste que no lo lograría? mira con quién hablas. - le sonrió orgulloso, pues tenía razón. Por algo era el más buscado de toda corea.

Jungkook solo le sonrió y se acomodó frente a la chimenea con su cachorro, poco a poco dejaba de temblar. Taehyung se sentó a su lado, admirando a Jungkook cuidar a su bebé, le parecía hermosa la manera en la que cuidaba y protegía a su hijo, cosa que su madre no hizo con él.
Jungkook lo atrapó mirándolo con esos ojos de ternura, ambos apartaron la mirada rápidamente y Jungkook susurró.

- Gracias.

Taehyung sintió una presión en el pecho, nunca nadie le había dado las gracias. Hacia trabajos para algunos mafiosos pero ninguno le agradecía, pues le decían que era su deber y que le pagaban por ello, en parte tenían razón. Sus ojos se iluminaron y sentía una gran necesidad de llorar. Oh, no se pudo contener, las lágrimas comenzaron a brotar y a escurrirse por sus mejillas, pequeños sollozos se hicieron presentes llamando la atención de Jungkook.

- ¿Q-Que pasa? - miró preocupado al peligris que tenía a su lado.

- N-No es nada. - se cubrió la cara avergonzado. - No m-me mires. - asomó un ojo por la separación de sus dedos dejándole ver a Jungkook unos ojos brillantes.

El pelinegro no pudo decir nada porque Taehyung se paró del lugar y salió de la cabaña.

La curiosidad inundó el cuerpo del menor viendo cómo la puerta de la fría cabaña se cerraba, al final decidió dejarlo tranquilo y ocuparse de lo principal, su bebé.

Las horas pasaron, el frío aumento y la luz desaparecía rápidamente, y cierto alfa seguía sin aparecer. El pelinegro se levantó, dejando a su cria cerca de las llamas de la chimenea que tanto le había costado mantener vivas.

Se estiró un poco, cerró sus abrigos y los acomodó, iba a buscar a TaeHyung. Abrió la puerta y salió, no pasó ni un segundo para que el frío cubriera su cuerpo a pesar de los abrigos, su cuerpo temblaba y casi no podía mantener los ojos abiertos por las fuertes olas de aire.

Y el peligris había estado horas aquí afuera.

Camino con esfuerzo por sobre la nieve que parecía que por poco tragaba sus pies.

- ¡TaeHyung! ¡TaeHyung! .- mierda susurró, lo había buscado unos minutos y ya estaba cansado.

De repente se quedó quieto, sus sentidos agudizandose lo más posible y mirando atentamente su alrededor.

Se sentía observado.

Escucho un ruido justo detrás de él, giro lo más rápido posible con la intención de atacar a su posible amenaza. Dos grandes manos sostuvieron sus brazos antes de que pudiera golpearlo y pudo escuchar una casi inaudible risa por el viento zumbando en sus oidos.

- ¿Te asusté? mh lo siento, escuché tus gritos y vine.

- Idiota, sabes que puedes enfermarte, adelante, vamos a la cabaña.- El de cabellos claros lo miro sorprendido, había escuchado a Miles de personas quejarse de el, pero nunca que se quejen de el por preocupación.

El Omega sentía que se estaba preocupando demasiado por él, siendo que apenas y se conocían.

Decidió cerrar el tema atrás y justificarlo con un "si el muere, nosotros también" porque siendo sinceros, el solo con dos cachorros, no podrían sobrevivir.

𝚟𝚊𝚛𝚜𝚒 ꒰🍲꒱

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⏰ Última actualización: Oct 21, 2020 ⏰

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