Psicopata

[06]

Ocho de septiembre

-jimin.. bebé despierta.. -lo llamaba el pelinegro-

-abrió los ojos lentamente, y al ver a jungkook a su lado no pudo evitar sonreír- buen día

Sus bocas se unieron en un tierno beso, moviendo sus labios lentamente, haciendo que una sincera y tierna sonrisa apareciera en los rostros de ambos

-buen día -respondió para luego besar la mejilla del contrario- vamos, tenemos que ir a trabajar

Ambos se levantaron, desayunaron, y prepararon para su jornada laboral. Al ser sábado, trabajaban medio día solamente, por lo que tendrían la tarde libre

Al terminar su turno, volvieron al edificio así jungkook podría bañarse, Lisa le había llenado la cabeza de harina y huevos. Ya que no lo vería el nueve, lo felicitó por su cumpleaños ese día.

-Lisa me las pagará, ya verá, le arruinaré su muy perfecto flequillo -dijo saliendo del baño con una toalla al rededor de la cintura, y otra secándose el cabello. Jimin evitó su mirada sentado en el sofá- ¡hey!, ¿Todo en orden?

-em.. si, ¿Porqué?

-has estado raro desde que salimos de la cafetería, ¿Sucede algo?

-lisa y tu son muy cercanos ¿No?

Jungkook ya entendía a que se debía su actitud extraña, y lejos de molestarle le pareció lindo

-mm si, nos conocemos desde hace tiempo

-mm ya..

-tenemos muchas cosas en común -se acercó hasta arrodillarse frente al rubio- como por ejemplo, ambos somos homosexuales

Al oír eso jimin volteó a verlo con los ojos abiertos

-¿Qué? ¿Lisa es lesbiana?

-si, está con Rose, la que se encarga de los pasteles

-¿Rose también es lesbiana?

-por dios minnie, necesitas estar más atento, se la pasan pegadas cuál piezas de Lego

-juro que nunca lo había considerado, ahora que lo dices muchas cosas tienen sentido

Jungkook soltó una carcajada

-eres muy lindo cuándo estás celoso, ¿Lo sabías?

-no estaba celoso -el castaño lo miró incrédulo- bueno quizás un poquito

-solo tengo ojos para ti, dulzura

-es que pasan muchos chicos lindos por la cafetería.. -desvió la mirada-

-okay ahora yo me siento celoso -jimin se echó a reír- iré a vestirme, tu ve y cambiate el uniforme, saldremos

-¿A dónde vamos?

-es una sorpresa -sonrió-

Una vez listos, volvieron a salir, el rubio preguntó varías veces a dónde iban, mas el contrario se negó a dar alguna pista sobre su destino

-kookie.. odio el suspenso, dime, vamos~~ -comenzó a tirar del brazo del mencionado-

-rodó los ojos riendo divertido- ya casi llegamos, aguanta un poco

-no conozco esta parte de la ciudad, ¿no vendrás a matarme, o si?

-soltó una sonora carcajada- no, claro que no. Mira, ahí es -señalo un edificio de no más de diez pisos, estaban a más o menos media cuadra de distancia, por lo que, sí alguien salía, no los verían-

-¿dónde estámos?

-ahí viven.. -susurró en el oído del rubio, quién al oír esas palabras lo miró con la boca y ojos bien abiertos- vendremos mañana en la noche -acarició la mano contraría que todavía estaba unida a la suya-