Capítulo I

174 16 11
                                    

Los rayos de sol se filtraron por la cortina,  eran ya pasadas las 10am, giró su cuerpo a su costado encontrándolo vacío y frío; su esposo se había levantado horas atrás. 

De verdad no comprendía como La Zhan se podía levantar a las 5am, preparar el desayuno, estar bañado, arreglado y no estar ni un poco agotado, él apenas y podía levantarse antes de las 9am.

Se sentó en la orilla de la cama, estirándose y frotando sus ojos para ahuyentar el sueño. Escucho como la puerta estaba siendo abierta lentamente.-Lan Zhan, buenos días!-dijo con una enorme sonrisa-. Lan Zhan se acercó a él depositando un suave beso en su frente. -Buenos días Wei Ying-. El mencionado estiró sus brazos para que lo abrazará,cosa que fue concedida al instante. -De verdad tienes que ir a trabajar hoy? Creí que tenías libre el día completo.-dice haciendo un pequeño mohín de tristeza-. Lan Zhan sonríe levemente mientras acaricia su mejilla. -Lo siento, pero será algo rápido, solo tengo que entregar esos documentos y regreso a casa. -Sólo eso?, ¿De verdad? -lo ve con ilusión-. -Lan Zhan lo ve con completa seguridad-Mn. Finalmente lo suelta y Wei Ying le sonríe mientras se dirige al clóset a sacar su ropa de hoy. -Esta bien, si tú me dices que es algo rápido, te creeré. Tal vez iré a visitar Shijie para no quedarme solo.-de pronto recuerda algo deteniéndose a medio camino de su destino-. Por cierto podemos pasar recogiendo a A-Yuan de la casa de Xichen y A-Cheng, estoy seguro que la pasó muy bien con sus dos tíos. -Mn. -afirma Lan Zhan-.

Al terminar de sacar su ropa. detiene sus pasos al ver la penetrante mirada de su esposo. -¿Ocurre algo? .-pregunta confundido-. Lan Zhan parece pensarlo un rato para finalmente responder.-Mn, Wei Ying es hermoso. -un inevitable sonrojo invadió sus mejillas-. -Lan Zhan!!!! No digas ese tipo de cosas sin avisar, mi corazón no lo aguanta. Escucha cómo el contrario se ríe levemente. -totalmente indignado le da la espalda- . -Ahora te estás burlando de mi?. Escucha que se acerca y unos brazos envuelven su delgada cintura. -Wei Ying es muy tierno, te amo. -el mencionado se da la vuelta y lo abraza del cuello. -Yo también te amo mucho mi hermoso Lan Zhan.

Se quedaron unos segundos más así. -Esta bien. Deja que me arregle y nos vamos juntos, te parece?. -Mn.

--------------------

Ya en el auto Wei Ying estaba viendo su celular con el ceño fruncido. -Pasa algo?. -pregunta Lan Zhan sin apartar la mirada del frente. Transcurren unos segundos como si estuviera pensando en qué responder. -Mmm no, solo me extrañó algo que ví. Algo sin importancia. -dice con una sonrisa tranquilizadora. -Seguro?. -pregunta sin estar completamente tranquilo-. -Si amor, todo bien. No te preocupes, si? . -sonríe- Vamos por nuestro rabanito.

 Observa de reojo como Wei Ying pone en silencio su celular. Lan Zhan no pudo evitar sentir un mal presentimiento.

Al llegar a la casa de su cuñado y hermano, se pone al lado de Wei Ying y lo detiene. -Lan Zhan??. -lo ve sin comprender. -Wei Ying sabes que puedes confiar en mí, yo siempre te protegeré. -lo toma de una mano, dejando un beso en su dorso-. Wei Ying lo ve pensativo por un momento. -Yo sé que me protegerás de todo mal, solo me extrañó tener tantas llamadas perdidas en mi celular de un número desconocido -Lan Zhan hace un mohín de molestia recordando que Wei Ying hizo esa misma expresión hace un par de días- Pero no te preocupes, ya lo bloqueé. -le da un pequeño beso en su mejilla-. -Vamos adentro estoy seguro de que A-Yuan se muere por vernos luego de estar una semana con su primito y tíos. -lo toma de la mano, entrelazando sus dedos para dirigirse a la puerta. Tocan el timbre, esperando a que abran y escuchan a través de la puerta un pequeño grito diciendo "¡Mis papás ya llegaron!", no pueden evitar sonreír al saber que era su hijo. Al instante la puerta es abierta, mostrando la pequeña figura de su hijo, viéndolos con una enorme sonrisa en su rostro. -Llegaron!!!.

Wei Ying se agacha para poder cargarlo y llenarle de besos todo su rostro, Lan Zhan le deja un pequeño beso en su frente y revuelve su cabello. -con voz dramática Wei Ying empieza-. -Pensaba que mi propio hijo se había olvidado de mí, te escuchabas en las llamadas tan feliz aquí, que incluso pensaba que ya no querías regresar con nosotros. -Lan Zhan sonríe por unos segundos al ver el rostro de absoluto horror en su hijo y como este se abraza efusivamente el cuello de Wei Ying. -NO! Yo nunca me olvidaría de papá y papi, los amo mucho. -dice con la voz rota. Wei Ying ríe bajo y  le da suaves palmadas en la espalda para calmarlo. -Ya, ya… te creo, te creo. Vamos adentro con tus tíos, qué por cierto, dónde están?, ¿Y por qué tú abriste la puerta? -lo ve serio-. Y si era un extraño?

Prove me that i'm wrongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora