Capítulo 5

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Cinco meses antes ...

No grites. ¡Por favor, no grites, Juvia!

Juvia pronunció una súplica silenciosa para sí misma, mientras se sentaba directamente frente a su amado. Este no era el momento para que ella se enamorara demasiado. En ese momento, Juvia se dirigía a una pequeña isla para una misión crucial que el Maestro Makarov le dio al Equipo Natsu. Juvia se convirtió en el reemplazo de último minuto de Erza, porque se necesitaba al mago Titania para otra asignación de clase S.

El mago del agua se dio cuenta de que Erza la eligió personalmente. Por lo tanto, Juvia sabía que este no era el momento de hacer que el estoico mago del hielo fuera todo amoroso. Pero, ¿cómo puede contenerse cuando dicho tipo se sentó frente a ella, mirando perezosamente por la ventana? Los rayos del sol lo bañaban con magnificencia, y Juvia solo podía esperar que sus ojos no se transformaran en formas de corazón.

"Ugh ~ ¿Dónde diablos está Wendy cuando necesitas su troia?" una voz cansada se quejó junto a Juvia, lo que provocó que la maga del agua girara la cabeza hacia la izquierda para comprobarlo.

Dejándose caer en el asiento al lado del bluenette, Natsu levantó la cabeza para mirar el techo del tren, maldiciendo internamente al villano que inventó los transportes. Verlo hizo que Juvia recordara algo muy importante. Ella golpeó un lado de su cabeza por ser bastante olvidadiza.

"¡Juvia casi lo olvida!" exclamó Juvia, levantándose de su asiento para alcanzar una canasta que guardó en el compartimiento superior. Cuando volvió a su asiento, sacó un frasco aislado del interior de la canasta. Vertió un líquido dorado humeante en la tapa del frasco y se lo entregó al asesino de dragones de fuego. "Toma, bebe esto Natsu-san," ofreció.

Tanto Lucy como Happy se inclinaron hacia adelante con curiosidad. "¿Qué es eso, Juvia-chan?" Preguntó Lucy, gustando el aroma que producía la bebida.

"Juvia creó este brebaje para Natsu-san. Siempre ayuda a Gajeel-kun cuando tomamos el tren para una misión", explicó. "Juvia está muy segura de que también funcionará en Natsu-san."

Natsu se sentó derecho y le dio al mago de cabello azul una mirada de duda. "¿Estás seguro de que es seguro?"

"La troia de Wendy-chan está incorporada", asintió Juvia con entusiasmo. "Es como el té. Por favor, pruébalo, Natsu-san," lo animó con una sonrisa.

El chico de cabello rosado todavía no parecía convencido, pero tomó el brebaje de ella. El aroma herbal ya le proporcionaba un efecto calmante. Cuando estaba a punto de llevarse la taza a los labios, Juvia acercó inocentemente su rostro para soplarla.

"Todavía hace bastante calor, Natsu-san," le advirtió, ajena al acto íntimo que acababa de ejecutar. Lucy y Happy se miraron el uno al otro con expresiones de asombro. La boca de Gray se abrió de par en par.

Natsu tardó un poco en reaccionar mientras miraba al mago del agua, que seguía soplando el líquido caliente. Cuando su presencia de ánimo se hizo cargo, Natsu se inclinó hacia atrás para crear la mayor distancia posible de ella. "¡Demasiado cerca, Gotas de lluvia!" gritó. Juvia no entendió lo que quería decir.

"Natsu no se escaldará, Juvia. Come fuego", explicó Lucy con una expresión divertida.

"¡Oh!" Juvia enderezó la espalda, pero aún sin darse cuenta de lo que hizo que Natsu se sonrojara furiosamente. "Juvia lo olvidó."

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