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Fue un cálido día de verano y decidimos hacer una pequeña comida en nuestra casa

Nos encontrábamos todos riendo y charlando como un día cualquiera

La abuela se estaba tomando unas pequeñas vacaciones y los abuelos tenían ganas de vernos

Y mamá... Pues ella tenía ganas de vernos a todos juntos y ahí estábamos disfrutando el que sería el último momento en familia

Hubo un momento de la tarde en la que mamá Hanna se levantó de la mesa en la que nos encontrábamos y entro a la casa seguida de mamá Emily

Fue extraño pero nadie se preocupo demasiado ya que a veces necesitaban despejar un poco su mente y comenzaban a caminar

Un grito nos alertó a todos y corrimos al interior de la casa encontrándonos con un cuerpo tirado sobre el suelo

La ambulancia no tardó en llegar y todos nos encontrábamos en la sala de espera

Los mayores se distraian jugando con los niños

Y mamá Emily... Bueno ella estaba ausente y no demostraba ninguna emoción lo cual me preocupaba

Cuando Jeremy salió todos supimos lo que había pasado y sin más un llanto desgarrador se hizo presente

Mamá se aferrana a Jeremy como si su vida dependiera de eso y sin poder evitarlo Jeremy lloraba en silenció tratando de no desmoronarse frente a todos

El dolor que desprendía mamá era descomunal

Y verla de esa manera me rompía el alma y las lágrimas que brotaban de mí no eran suficientes para saciar mí dolor

Y luego pensé en que probablemente mí dolor no era ni una pizca del que estaba sintiendo mamá

Todos nos aferrabamos a alguien en busca de consuelo que no íbamos a encontrar hasta que finalmente el escandaloso llanto seso y todos nos miramos preocupados

Horas más tarde salía Albert con la misma mirada de enojo y frustración por no haber podido hacer algo

Los meses siguientes fueron duros tal cual dijo mamá alguna vez

Estaba enojada con el mundo y ese enojo se mantenía en mí de forma permanente sin poder ser liberado contra algo o alguien

Los abuelos venían más seguido a visitarnos y tratar de pasar más tiempo con nosotras en sus últimos años

Y cuando finalmente nuestro cumpleaños número 22 llego recibimos una pequeña sorpresa

Nuestras madres habían preparado un video de felicitaciones en las que pudimos "interactuar" un poco con ellas

Además de videos diarios que comenzaron a grabar cuando formalizaron su relación

Y también descubrimos que nos habían dejado cuentas bancarias para nosotras y nuestros hijos

Nuestra familia no era millonaria pero si tenían suficiente dinero para vivir durante años sin tener que trabajar

Gracias - susurramos hacia mí abuelo Patrick

El video nos había dado la sanación que tanto buscábamos

La tristeza sería permanente pero el dolor se evaporaba lentamente

Con el pasar del tiempo más nombres se sumaron al rededor de los de nuestras madres

Y cuando nos dimos cuenta nuestros pequeños ya tenían 10 y 12 años

Adam - llamo Lucy

Ten, deja una en cada nombre - pidió entregándole 5 rosas blancas

Tu también mí amor - susurré a Heather entregándole otras 5 rosas pero esta vez  Rojas

Cada fin de semana que podíamos visitábamos el cementerio y hablábamos con los abuelos y con nuestras madres

Les contábamos a nuestros hijos los hermosos recuerdos que atesorabamos de ellas o las travesuras que en su adolescencia ellas hicieron

La vida no fue fácil sin ese par de maravillosas mujeres a nuestro lado

Pero hicimos todo lo posible para disfrutarla hasta el último segundo antes de volver a encontrarnos.

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