sweet, sweet > kiribaku ¡!

uno. <3

el pequeño rubio se encontraba hecho bolita en la cama que compartía con su mayor; sorviendo su roja nariz y estornudando múltiples veces a causa de su terrible resfriado.

en la televisión se estaba reproduciendo miraculous, su caricatura favorita, a su lado izquierdo tenía una cajita de pañuelos junto con una taza de leche con chocolate que le preparo su alfa antes de irse a trabajar, quién instinto muchas veces en quedarse, pero su terco omega se negó rotundamente.

al final kirishima se rindió y no muy convencido se marchó, sin antes decirle a su bebé cuanto lo amaba y que haría todo lo posible por salir temprano.

pero, necesitaba tanto a su noviecito, que este lo abracé mientras dejaba besitos y cariñitos por todo su rostro, susurrando de vez en cuando a su oído, "te amo tanto, mi amorcito. eso es, eres un buen chico. me haces tan feliz. eres precioso, bakugou, por mi deboraría esa linda boquita todo el tiempo"

no pasó mucho para que sus ojos se llenaran de lágrimas y pronto estas cayeran por sus cachetitos; en serio, en serio quería que estuviera aquí.

pasaron horas y su llantito no paraba, hasta que el sonido de la puerta lo alarmó, viendo a un apresurado kirishima entrar a la habitación.

se levantó, yendo a los brazos ajenos, acurrucandose en su pechito y aspirando el dulce aroma de su adverso. kirishima lo abrazaba con fuerza, repartiendo caricias en su espada y piquitos en su cabeza.

el primero en separase fue eijiro, dejando pocos centímetros entre ambos. tomó las gorditas mejillas de su pequeño, viendo esos lindos ojitos rojos e hinchados, señal que había estado llorando, por lo lo sintió su corazón doler.

─perdóname, mi cielo, debí quedarme contigo. soy tan idiota.─beso la frentecita de su bebé, viendo como el mismo volvía a derramar lágrimas.─oh, no, no. no llores, mi vida, por favor.─y como si hubiera dicho lo contrario, el pequeño que tenía entre sus brazos lloro con más fuerza. su cuerpito temblaba.

rápidamente lo cargo, agarrando sus muslos con cariño y sentándose en la cama, aún con su lindo omega encima.

─¿p-por qué tardaste ta-anto?, me sentía.. tan sol-lito─ּel llanto le impedía hablar, pero su alfa entendió perfectamente y sin importar ensuciar su traje, limpio con la manga del mismo los moquitos que caían por la nariz del contrario, dejando un besito en la punta de la misma. después lavaria su ropa.

─la reunión tardo más de lo que tenía planificado, mi bizcochito, lo siento, en verdad.─ּel nombrado escondió su cabecita en el cuello contrario, aferrándose a su cuerpo, finalmente había parado de llorar y su carita se torno de un color rojito, similar al de un tomatito.─ya quería llegar a casa para poder mimar a mi lindo y enfermo cachorro, quien agarro esa gripe por desobedecer y bañarse muy tarde.─

─alfita...─bakugou salió de su escondite, abultando sus belfos y formando un tierno pucherito que el mayor moría por besar, pero el omega al ver las intenciones que tenía, cubrió su boquita, negando varias veces.

─te enfermeras, no quiero, no quiero. me dolería el pechito si tuvieras que pasara por esto tan feito.─kirishima juraría que morirá de diabetes en ese instante, ver a su pequeñito preocupado por el lo ponía tan feliz, hacía que su corazoncito se acelere.

─no le niegues a tu alfa y déjame probar esa linda boquita.─quito las manitas de su bebé y sin importar los reclamos que este decía, beso aquellos labios en un puro y tierno beso.

🍡

lo mejore un poquito, nuevamente esperó que les guste. (╥﹏╥)

si no votan una kiribaku shipper muere, ea.