Past (RouRen)

Past

Empalagosos, desvergonzados y enamorados. Así era como Lan QiRen veía a su sobrino favorito Lan WangJi al lado de su esposo que lo había corrompido, y es que el problema no era que se hubiese convertido en un manga cortada, sino que Wei WuXian era la única mancha en su expediente intachable. Negó con la cabeza y caminó erguido con las manos en la espalda hasta ellos para llamarles la atención.

―WangJi, Maestro Wei ―carraspeó para llamarles la atención, y en cuanto estos voltearon a verlo, prosiguió―. Me parece que no es adecuado de que muestren afecto en público, los demás discípulos pueden verlos y no es correcto, les pido ―por milésima vez, pensó― que guarden aquella intimidad para cuando se encuentren a solas y en su jinshi.

―Mmh ―Lan Zhan saludó con una leve inclinación y los puños al frente, sabía que lo que decía su tío era correcto, pero le era extremadamente difícil sacarle las manos de encima a su esposo.

Por su lado, Wei WuXian también solo se resignó a aceptar mientras por la espalda tomaba la mano de Hanguang Jun, una pequeña muestra de rebeldía ante el mayor de los Lan. Lan QiRen acariciándose la barba se despidió de ellos y se alejó lo más rápido posible, no quería seguir viendo aquella horrorosa escena.

―Lan Zhan, ¿acaso el viejo Lan QiRen siquiera se ha enamorado alguna vez?

―Mmh.

―Claro que sé que es posible, es solo que no sé. Soy consciente de su aversión hacia mí por haber corrompido a su pequeño e inocente sobrino, que tu y yo sabemos que no es nada más alejado de la realidad, pero es como si odiara al amor. Como si en su juventud hubiera sufrido por ello y odiara a todos quienes son felices.

Lan WangJi frunció el ceño al escuchar aquellas palabras provenir de su conejo negro, pero por más que quisiera a su tío y se propusiera defenderlo, la verdad es que aquello le sonaba hasta un poco lógico. Ni él ni su hermano conocían más allá a Lan QiRen que como un tío estricto que se encargó de su educación mientras dirigía la secta GusuLan debido al reclutamiento de su padre, para él, lo único de vida privada que conocía de ese hombre mayor era el mismo parentesco que tenían ellos y nada más.

―¡Ya sé! Debemos averiguar el pasado amoroso del viejo QiRen ―Wei WuXian golpeó decidido sus manos―. Y tú mi querido Lan Zhan me ayudarás en esta misión.

―Mmh ―asintió.

―Así que ya que tu me dices que no sabes nada al respecto, puede ser que tu hermano mayor sí. Así que vamos a hablar con Zewu-Jun de ello.

Juntos caminaron hasta el Hanshi en donde se hallaba Lan XiChen, el mayor de los jades de Gusu había salido de su reclusión pocos meses atrás, lo cual no significaba que se encontrara bien, pero al menos ya mostraba su rostro a los demás y era posible solicitar una cita para hablarle. Claro que para Wei WuXian eso no era necesario al ser su cuñado, además de ir en compañía del mismo hermano menor.

En cuanto llegaron, Zewu-Jun los recibió con una auténtica sonrisa y el cansancio en su rostro pareció desaparecer al sentarse en la mesa y servir una taza de té para ambos. Wei WuXian no perdió el tiempo con frivolidades y fue directo al punto.

―Hermano XiChen, ¿conoce algo sobre la vida amorosa del viejo QiRen?

Luego de disimular que casi se atoraba con el té, Lan XiChen respondió.

―¿Disculpe? Maestro Wei, usted sabe que una de las reglas del clan y de la secta es no hablar de otros a sus espaldas. Aunque supiera algo de eso, no se me permitiría hablar.

―Oh, aunque supiera... eso significa que no sabe nada, ¿eh? ―Wei WuXian cada vez se iba adentrando más en su papel de detective.

―WangJi, ¿puedes decirme de qué trata todo esto? ―le preguntó el líder de secta a su hermano.