Nido

9.9K 525 47
                                    

Había una vez un nido creado para albergar a unos pajaritos. En el nido no había ninguna relación sanguínea, pese a ello un ave fuerte y galante refugió bajo su ala a tres pichones ajenos.

En ese nido no había una mamá ave, pero no importaba porque tenían a un pájaro muy sabio que les brindaba una paz y un gran sentimiento de calidad.

Los pichones crecieron y fueron abandonando el nido, pero siempre volvían; eran pichones filiales y buenos que pese a todo lo que tuvieron que vivir nunca pudieron odiar a la gran ave que los acogió.

Todos fueron olvidando regresar al nido poco a poco; cada uno encontró su propio árbol para intentar crear un nido con la avecilla correcta. Es así que nadie se enteró del huevo que se habían quedado en el viejo nido abandonando.

Pasó el tiempo, ya era hora de salir del huevo; un pichón salió sin que nadie le recibiera al mundo o alimentara; el pichón no tenía a nadie que le enseñe a crear un nido, a qué comer, a cómo volar.

El tiempo pasó, pero un día donde el pichón llorando por comida se cayó.

Creyendo que moriría fue recogido por unos cuervos; estos le enseñaron a comer, a vivir y a su manera a volar.

Él fue un pichón que pintó sus diversos colores a uno ónix.
No quería saber sobre su verdadera familia, no tenía sentido, prefirió esforzarse por ser el mejor cuervo y alcanzar todas las expectativas.

No quería su naturaleza, pues, la repudia con todo su ser.
Si no fuera por esa naturaleza no sería criticado; con ese pensamiento en mente hizo todo por la aprobación.

Un día todo cambió, eso le asustó, le dijeron vilmente que se quitara ese color; le gritaron que no era su naturaleza, que se deje de tonterías le dijeron...
Pero él era un cuervo...
Solo sabía ser un cuervo...
No quería escuchar esas palabras tan crueles de los que se hacían llamar de su misma especie.

Él estuvo solo a pesar de ser el legítimo dueño de ese viejo nido, pero esa ave tan fuerte y galante no lo quería, se lo dejó en claro.
Lo repudiaba por comportarse como un cuervo...

Pero él no sabía cómo se supone que debía de comportarse; sus miradas le herían profundamente, ¡quería regresar con los cuervos, a ellos no les importaba si era un petirrojo disfrazado de cuervo!

Las únicas aves buenas con él eran el primer polluelo que fue recogido y una vieja ave que pese a todo le escuchaba con calma.

El petirrojo se decidió, si pudo ser un cuervo podría ser ahora un petirrojo.
Eliminó todo de sí para ser como su padre quería que fuese...
Grande fue su decepción cuando se dio cuenta que solo fracasaba y se ganaba más odio. Le dijeron que lo intentara cuando ponía todo de sí para ser como ellos...

Nadie le decía cómo se supone que tenía que volar, comer o crear su nido; solo le decían que estaba mal, que se esforzara y que por fin lo intentara...

Cómo les diría que perdió plumas intentándolo...

Un día el ave dejó de acercarse, se distanció; un día de invierno cuando el viento más azotaba y la espesa nieve caía, la avecilla murió de frío.

La familia de cuervos mostró aparente indiferencia ante el suceso, pero por dentro lloraban, en cambio, la familia de petirrojos lloraba la pérdida de la avecilla siendo estos los causantes del suceso.

------------------------------------
¿Cuento corto? ¿Adivinan quienes son los cuervos?
Me vi un documental de aves y boom, mi cerebro dijo toma esta idea
¿Les gustó?

Advertencia:

Todos mis escritos son creados en mis noches de insomnio.

Damian Wayne [Oneshots]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora