Our Chance~ || Seon x K

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Seon llevaba varios días evitando hablar con el japonés sobre ellos. Porque estaba claro que debían hablar, aunque el menor aún no sabía si K correspondía sus sentimientos

Porque sí, le encantaba el mayor y no soportaba la idea de que su relación se volviese incómoda por su confesión

-Seonie, ¿hoy estás libre?

El nombrado se levantó rápidamente de su asiento al escuchar la voz de K, casi tropezándose con sus propios pies y provocando una suave risa en el mayor

-S-sí hyung, ¿por qué?

-Me gustaría salir contigo, sólo si quieres claro.. y además tenemos que hablar

El coreano asintió nervioso, evitando la mirada del mayor. Este notó la incomodidad de Seon y se acercó a él

Dudó un momento antes de tomar la mano del menor y entrelazarla con la suya

-Tienes que decirme qué te pasa.. no me gusta que me evites, Seon- K miró apenado al menor, que al ver el tierno puchero del mayor no se resistió y lo atrajo hacia él para abrazarlo

-Siento haberte evitado hyung, necesitaba algo de tiempo para pensar. Pero.. ¿en serio quieres salir? Podemos hablar aquí, me refiero.. creía que preferías salir lo menos posible por lo de tus padres

K sonrió, le gustaba demasiado la sensación de que el menor lo conociese tan bien. Lo miró a los ojos sonriente, sin separarse del todo del abrazo

-No te preocupes por eso Seon, tarde o temprano iba a tener que empezar a arriesgarme. Además, Niki les ha dejado bien claro que no estoy aquí.. parece que mi fuga ha sido un éxito

-Entonces, ¿puedo considerar esto una salida como amigos o es.. una cita?- K lo miró pícaro, desde la confesión que el coreano había hecho días atrás su timidez había desaparecido casi por completo y ahora sólo le dejaba indirectas bastante directas

-Me gustaría considerarlo una cita. Pero solamente si tú quieres, claro- dijo susurrándole al oído y haciendo que el menor se tensase notablemente

Seon no iba a negar lo innegable, se moría por tener una cita con el mayor y en ese momento no podía creerse que K lo estuviese invitando a salir

-Sabes de sobra que me encantaría salir contigo

El japonés sonrió satisfecho, tal vez hoy tendría la oportunidad de declararse por fin. Porque no le importaba lo más mínimo lo que sus padres pudiesen opinar de sus gustos

En ese momento era feliz con su nueva vida y las nuevas personas que había en ella

Salió de su pensamiento y se dio cuenta de que todavía seguía abrazando la cintura del menor. No quería incomodarlo, pero por su reacción supuso que no le desagradaba

-Entonces.. nos vemos en un rato

-Sí..

Ambos se separaron tímidamente y Seon estaba a punto de irse pero antes de eso, se acercó al mayor y dejó un suave beso en su mejilla

K sonrió viendo como el menor se alejaba muy avergonzado

-¿Por qué eres tan lindo?

Flashback

-K, ¿me lo vas a decir de una vez? Llevas cinco minutos mirando al infinito

-Heeseung me puedo fiar de tí, ¿cierto?

-Claro que sí

-Está bien, como se enteren mis padres estoy muerto. Soy gay- el japonés esperaba algún comentario o reacción del menor pero este no dijo nada- ¿n-no vas a decir nada?

-No tengo nada que decirte.. no es nada malo K

-Si tuvieses unos padres como los míos lo entenderías, si se llegan a enterar de esto me desheredan

-No te preocupes, no se enterarán

-Gracias Heeseung

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-Lee Heeseung, ¿verdad?

-Ajá, ¿qué necesitais?

-Queremos negociar contigo- el estudiante de intercambio coreano pudo ver las miradas sospechosas de aquellos estudiantes. Sabía que eran de familias importantes y si hablaban con alguien como él sólo podían estar tramando algo relacionado con K

-¿Sobre qué?

-Sobre tu queridísimo amigo K

-No pienso daros ningún tipo de información

-Ni siquiera a cambio de que... ¿te prestemos algo de dinero para que pagues tu carrera?

Tenía muy claro que no debía decir nada pero.. la situación económica en su casa no era muy buena y si tenía que volver a Corea, sería mucho peor

-No me fío de tí, es mentira

-A mí no me parece una mentira- dijo el estudiante sacando un sobre y dándoselo a Heeseung

Lo abrió encontrándose con una evelada cantidad de dinero en efectivo que le hizo replantearse aceptar el trato

Luchaba para que su lado egoísta no saliese a la luz, no quería traicionar a K, no después de todas las cosas buenas que habían pasado juntos

Pero recordaba a su familia, a su madre, y tenía ganas de acceder. Sabía que con ese dinero solucionaría muchos problemas y su madre podría trabajar tranquila

-¿Se lo diréis a K?

-No podemos delatar a nuestro aliado

-Está bien, entonces acepto..

Y esa fue la peor decisión que podría haber tomado

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