SICILIANA (En Pausa)

advertencia

Advertencia

La historia que se presenta a continuación, es no apta para todo lector. Si eres susceptible a agresiones verbales y escenas pasadas de tono, no te la recomiendo. No me hago responsable de traumas posteriores.

Si decides leer esta historia es bajo tu propio riesgo. Esta historia no representa la realidad social, económica o política de los personajes o de los lugares donde se desarrollan los hechos. Algunas escenas pueden incluir temas sensibles y lenguaje no apto para menores de edad, también pueden incluir escenas gráficas y descriptivas de índole sexual. Esta historia es básicamente una mezcla de: Acción, engaño, posesividad, sangre, muerte, peligro, misterio, suspenso, conflictos, violencia y traiciones.

Si llegaste hasta esta parte, eso quiere decir que estás dispuesto a seguir leyendo. Esta historia no es de romance suave, tanto los personajes principales como los secundarios te pueden causar frustración. Acuérdate que no somos perfectos aunque algunos de ellos piensen que sí.

Todos los personajes tienen su forma de pensar, tienen su vida propia, costumbres e ideas, las cuales pueden llegar a gustarte o no, también recuerda que los personajes no son los escritores, nosotros solo plasmamos lo que piensan y sienten, también me gustaría recalcar que no representan mis ideales o posturas sobre determinados temas. Si un personaje es o piense de una forma, no quiere decir que el autor esté de acuerdo con ello, recuerden que todo lo que escriba es ficción y cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia.

Recuerda que la historia es un borrador y puede ser retirada en cualquier momento, si se llegara a considerar que necesita ser modificada o editada para su corrección. Recuerda todo esto a medida que se vaya escribiendo. Sin más que agregar, son bienvenidos a la lectura. Espero que encuentres lo que estás buscando en estas páginas.

Sinopsis 

Soy una participante de la lucha entre lo bueno y lo malo. En un juego en que pierde el que flaquea y primero ellos que yo. Y cuando lanzan la pelota perder no es una opción. No me gustaba perder, aquí no tenía en cuenta mis valores o moralidad aquí lo que me importaban eran los objetivos.

Iba en contra de todas las normas, eso estaba implícito en mi naturaleza, en la vida hay una balanza que se puede inclinar hacia cualquiera de los dos lados, ya fuera de forma equitativa y homogénea o en cualquiera de los casos elegir el bando correcto. O eras un ángel o eras un demonio. Me habían llamado de las dos formas, había tenido muchos nombres y en otras ocasiones, me han llamado, oscuridad, tormenta, luz, ladrona, paz, diabla, pequeña, sirena, asesina, monstruo, diosa y en todas ellas tenían razón, no soy una sola cosa, soy todas en una sola mente y un solo cuerpo. El libre albedrío era maleable después de todo y esa era toda la base en este estúpido juego llamado vida.

El amor, la esperanza, la fe, la bondad, la templanza, la felicidad, la justicia, la fortaleza e incluso el perdón, eran apéndices muchas veces inútiles del alma. Que te infiltran demasiada moralidad en el corazón, que se interponen en medio del camino de tu esencia y tu deseo de malignidad.

No nací siendo mala, los sucesos de la vida me hicieron inclinar la balanza; ya saben que camino elegí. La vida misma se había encargado de destapar y poner en evidencia mi verdadero fuero interior, que me permitía ver toda la mierda de la humanidad. Por eso dormía con un ojo abierto y en mi mano izquierda empuñaba la pistola a punto de ser disparada. No me fiaba de nadie y muchos darían cualquier cosa por mi cabeza. Así que ten mucho cuidado al querer jugar conmigo, porque soy la parte filosa de la navaja y te puedes cortar.

Asumo la responsabilidad de mis actos y elecciones. Este no es un manual práctico, es una historia que me sucedió a mí. Nadie más te puede decir lo que pasó solo yo y si le preguntaras a otra persona respecto a mi te estaría contando otra historia. Tal vez corregida o tal vez aumentada. El caso es que te estarían contando una historia muy distinta, por eso no quiero que se tergiversen los hechos.

Detesto derribar mitos, no hay traumas que me dirigieron en esa dirección, de niña era muy ajena a todo esto, nunca se me hubiera pasado por la cabeza que me emprendería por el camino del mal, por suerte fui hija única, no tendría que servir de ejemplo a nadie, sola, rota o vuelta a unir.

Soy ágil, soy letal y me llaman Siciliana.

Espero te guste esta pequeña introducción.

Gracias por leer.

Ele.