Final

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Ya han pasado 87 años...

Nah, sólo fueron 4.

En estos cuatro años pasaron todo tipo de cosas. Por ejemplo, Yuqi y Geonhak están saliendo, al igual que Xinlong y Wonyoung.

Soojin y Yeonjun aún están juntos, los demás seguimos solos.

Después de la preparatoria, la mayoría tomó caminos diferentes. Hyejoo, Hyunjin y Sooyoung entraron en la misma empresa, incluso ya debutaron.

Miyeon y Soojin se fueron a otra. Wonyoung a otra. Felix igual. Jisoo y Lisa también.

Los únicos que estamos en la universidad somos Yuqi, Geonhak, Yeonjun, Xinlong, Zeyu y yo.

Y bueno, aún así Yeonjun ya estaba pensando en unirse a una empresa al igual que los demás.

De igual manera, los cuatro íbamos en diferentes universidades, Xinlong iba en una, la cual no recuerdo el nombre. Yuqi, Geonhak y Yeonjun en otra. Zeyu y yo íbamos en la misma, aunque Zeyu apenas comenzaba.

Yo quería algo diferente. Me gustaba mucho cantar, pero había mucha competencia, por lo tanto las posibilidades de triunfar no eran tan grandes y eso me aterraba.

Yo estoy estudiando Biología de la vida salvaje, se requieren muchos años, pero puedo apostar que valdrá la pena.

Ya que todos estábamos separados, a Yeonjun se le ocurrió la gran idea de reunirnos. También dijo que quería consejos sobre si seguir estudiando o unirse a una empresa como los demás.

Choi... bueno, nunca supimos de él. Los mensajes no le llegaban, y nadie sabía el número de teléfono de su mamá. Nunca supimos a dónde fue, o si regresaría.

Aún tengo la esperanza de que va a regresar.

En este momento me estaba cambiando, de nuevo como todos los días de mi vida, iba tarde.

Escuché como tocaron la puerta.

— ¡Yuri! ¡Seguro es Yeonjun! — Escuché a mamá gritar desde el baño.

Sí, aún vivo con mi mamá.

Más obligada que por gusto bajé, Yeonjun dijo claramente 5 minutos y sólo pasaron 3.

Ya en la sala no escuché absolutamente nada.

¿¡Lo imaginé?!

No, yo escuché que me habló.

Tal vez fue como la foto de miedo que viste Yuri, en dónde la mamá grita "a comer" y la verdadera mamá le dice "no bajes, yo también escuche eso"...

Una chica de 22 años asustandose por una foto, sólo a mí me pasan esas cosas. Escuché que tocaron la puerta de nuevo.

De mala gana abrí la puerta.

— ¡Yeonjun, dijiste que 5 minutos y claramente han pasado...

Me callé ya que este no era Yeonjun.

— Hola — Choi estaba ahí, parado, como si nada con una sonrisa algo triste.

Le solté un golpe en el brazo, algo molesta.

— ¿Por qué nunca nos avisaste? ¿Sabes cuánto sufrimos? — Antes de que pudiera seguir quejándome me envolvió en un abrazo.

— Perdón, en serio, perdón — Sentí mi hombro mojado y ahí fue cuando me percaté que estaba llorando.

— ¿Qué pasa? No te creas, Choi. No estoy enojada, al contrario estoy muy feliz — Lo abracé fuerte algo apenada.

— Te extrañé tanto, perdón por dejarte — Sonreí enternecida.

— Yo te extrañé aún más, tonto — Sin poder evitarlo solté un par de lágrimas.

Se separó de mí limpiándose un par de lágrimas.

— Mi viaje no iba a durar tanto pero las cosas se complicaron, tuvimos que dar en venta nuestra casa y... — Lágrimas aún caían de sus ojos. Antes de que pudiera terminar su oración, me armé de valor y le di un rápido beso en la mejilla.

— No te preocupes, Choi. Todo esta bien — Le sonreí sincera.

— ¿No fuiste la conquista de alguien en este tiempo que no estuve? — Bromeó algo sonrojado.

— Hmm, de echo sí — Él abrió sus ojos —, pero como yo soy tan testaruda, le dije que estaba esperando a que mi soulmate llegara.

— ¿Y llegó? — Preguntó con una tierna sonrisa.

— No — Él borró su sonrisa sacándome una carcajada — ¡Claro que sí!

Le revolví el cabello jugando.

— ¿Tú tampoco has sido la conquista de alguien?

— Mis sentimientos siguen siendo los mismos que escribí en la carta que te di — Me sonroje al escucharlo.

La carta aún la tengo guardada, cada que lo extrañaba la sacaba y la leía, de alguna u otra forma me calmaba, me hacia sentir amada, que sí iba a regresar conmigo.

— ¿Aún te gusta esta fea chica? — Solté bromeando.

— Yuri, cuando la noche tiende su manto, y el firmamento se viste de azul; no hay lucero que brille más, cómo esos bellos ojos que tienes tú — Se acercó a mí.

— Que poeta te has vuelto, Choi — Solté con una risa nerviosa.

— ¡Yeonjun! — Soltó de repente. Me tomó de la mano y comenzó a correr junto a mí — ¡Casi lo olvido! ¡Teníamos que ir con él!

Solté una carcajada a la vez que lo seguía. No sin antes gritar a mi mamá que ya me iba.

Lo extrañé tanto.

Tal parece que nuestra histórica historia tomó un rumbo diferente, pero me gusta mucho que sea así. Quién sabe? Tal vez con el tiempo por fin pueda decirle libremente al mundo:

Soy la novia de Choi.

Quién sabe? Tal vez y sí.

Por el momento me conformo con saber que me gusta, y probablemente yo le guste a él y no está lejos de mí como pensé que sería. Puedo apostar a que ambos lucharemos por esto. Haremos todo lo posible para que funcione.

Esta bonita historia de amor no termina aquí, tenganlo por seguro.

Porque nuestros caminos se han cruzado, igual a una fórmula matemática, igual a los mandamientos de las religiones, incluso igual la providencia del destino. Las evidencia del destino me han dicho que tú eres el origen de mis sueños y insomnios, Choi.

Así que no te preocupes, esto no es una simple coincidencia. Nosotros dos hemos encontrado nuestro destino.

Juntos.

✎ ᴛᴜ́ ᴀ ᴍɪ́ ɴᴏ 【ᴄ.ʙ.ɢ】ᴘᴛ.2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora