Más que una simple sirvienta

Capítulo 1

Mi vida ha sido un infierno desde que mamá murió hace 3 meses, mi padre me culpa por su muerte, y estoy de acuerdo, ella se sacrificó para salvar mi vida de ese Lycan, pude haber sido yo...desearía haber sido yo...al menos así no pasaría por todo esto...

Mi padre dice que si quiero quedarme en casa debo comenzar a trabajar, el ha estado desempleado desde hace un mes por culpa de su problema con el alcohol, sobrevivimos con comida que nos dan nuestros conocidos.

Hoy mi padre me dijo que me enviaría a trabajar al castillo Dimitrescu, está consiente de los rumores sobre el lugar pero parece no importarle en lo absoluto...no me importaría si me matan...al menos así saldría de este infierno...

Voy camino al castillo Dimitrescu junto a otras 3 chicas, tengo muy pocas pertenencias, así que solo llevo un pequeño bolso, hace bastante frío y mi harapienta ropa no me favorece.

Cuando llegamos al castillo quedo maravillada, es más grande de lo que creí, y se ve muy antiguo, nos recibe una mujer de unos 50 años vestida de sirvienta, ella nos lleva adentro del castillo, está muy cálido aquí adentro...la mujer dice que su nombre es Estela, y que es la sirvienta principal del castillo.

Estela: la señora es muy exigente con sus sirvientas, no hagan nada estúpido, habrán serias consecuencias si rompen algo, desobedecen o hacen algo que moleste a la dama

Estela sigue dándonos advertencias sobre lo que no deberíamos hacer, de pronto una figura muy alta se asoma por la escalera, es increíblemente alta, diría que mide casi 3 metros, jamás había visto a alguien así, no puedo distinguir bien su rostro ya que lleva un sombrero que cubre la mayor parte de su cara, la figura comienza a bajar las escaleras y cuando llega al final nos mira sin expresión alguna examinando a cada una de nosotras.

Alcina: espero que sean inteligentes y sigan las advertencias que Estela les dió, me presento, yo soy la dama del castillo, soy lady Dimitrescu-dice bastante orgullosa

Sigo sin poder ver bien su rostro, solo puedo ver la mitad inferior, su piel es muy pálida y usa un labial rojo de un tono oscuro, lleva puesto un vestido blanco que arrastra en el suelo, guantes de cuero y el sombrero negro que cubre su rostro. La dama nos explica las reglas del castillo, la más curiosa fue la de que no podíamos abrir las ventanas...aunque creo que aquí no hay lugar para la curiosidad. Luego de explicar las reglas la dama nos da un recorrido por el castillo y nos enseña a cada una nuestras habitaciones, nos deja instalarnos y nos dice que mañana comenzaremos nuestras labores en el castillo. Ya en mi habitación guardé mis pertenencias y admiré mi habitación, sinceramente era mucho mejor que la que tenía en casa, luego de observar todo tomé un baño y me fui a dormir.

Me desperté con el sonido del despertador, eran las 7a.m. la dama dijo que comenzamos nuestras tareas a las 8a.m. excepto por las que se designaron como cocineras, ellas comienzan a las 6a.m. para preparar el desayuno de las damas y el de las demás sirvientas. Me levanté de la cama y me puse el uniforme que se me había dado, me lavé los dientes y me peiné, me miré al espejo y debo admitir que el uniforme no se me veía nada mal, realmente me gusta, y es mucho mejor que la ropa harapienta que tenía. Luego de tender mi cama salí de mi habitación y fui con las demás sirvientas a desayunar, la comida era realmente buena, al terminar empecé mis tareas como sirvienta, la dama a menudo nos observaba atenta a cualquier error que cometieramos, me sentía muy nerviosa con la voluptuosa mujer observándome constantemente, ella parecía disfrutar poniéndome nerviosa, o eso creo porque me ponía más atención a mi que al resto, ni siquiera he visto su rostro pero tiene un cuerpo increíble, me pregunto cual será su nombre, después de todo solo nos dijo su apellido, es una mujer intrigante.

Al final del día volvía a mi habitación agotada, el castillo es realmente grande y limpiarlo es un desafío, fui a bañarme ya que había sudado bastante haciendo las tareas del castillo, me metí a la tina y me relajé en el agua caliente, en casa tenía que bañarme con agua extremadamente fría, realmente me gustaba el cambio, y me alegra no tener a mi alcohólico padre mandándome ha hacer todo en casa mientras el sigue bebiendo o durmiendo ebrio. Luego de mi baño me sequé y me puse el pijama, los pijamas que nos dieron son de seda, jamás había tenido un pijama de seda, era realmente cómodo, al acostarme me quedé casi instantáneamente dormida por el cansancio.

Me desperté exaltada por una pesadilla, en la pesadilla mi padre me apuntaba gritándome que todo había sido mi culpa, que debí haber sido yo, suelo tener constantes pesadillas sobre eso, sobre el día que mi madre murió, y sobre mi padre diciéndome cosas como esa. Me levanté de la cama y salí de mi habitación, recuerdo haber visto un balcón durante el recorrido que nos dió la dama, así que me dirigí hacia el, al llegar abrí las puertas y respiré hondo, hacía mucho frío pero no me importó, después de todo, ya estaba acostumbrada, mi casa no era exactamente muy abrigadora que digamos, siempre pasaba frío. De repente sentí una fría mano en mi hombro y di un salto por el susto, lentamente me giré y la vi

Alcina: creí haber mencionado que no debe haber ninguna sirvienta fuera de su habitación luego de las 9p.m.

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Suelo leer muchos fanfics sobre lady Dimitrescu, hace tiempo estaba planeando escribir uno, hoy tuve la inspiración para hacerlo, espero hasta ahora les guste la historia, no es tan largo el capítulo pero es un inicio, tengo planeado actualizar día por medio(un día si y otro no), agradecería mucho su apoyo y críticas, quisiera saber en lo que tengo que mejorar, gracias por leer♡