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ㅡ ¿Te sientes mejor? ㅡ Su rostro preocupado lo decía todo, estaba quizás más asustada que yo.
No.
ㅡ Sí, cada día me siento más sana.ㅡ Mentí, una vez más.
Con mucho cuidado ocupó el espacio en la en la angosta y fría camilla. Las sábanas asperas taparon mi rostro, dejándonos a ambas en una especie de cueva.
Los doctores vendrían en cualquier momento, estaban al tanto de las visitas de Hyunjin ya que ella no se perdía ni una. Desde el comienzo de la hora hasta el último segundo.
Sonrió apenas, algo avergonzada por la cercanía. Sus labios pintados de un color carmesí y su cabello algo despeinado. Su pálida piel hacia resaltar ésos tonos rosados en sus mejillas y en la punta de su nariz, debido a que era un día de muchísimo frío.
Estaré allí, detrás de ti cuando camines sola.
ㅡ Necesitas que te cante otra canción, eso siempre te ayuda.ㅡ
Me quedé unos sengundos pensando, observando su angelical rostro. Ella era mi ángel.
ㅡ Quiero que me cantes por siempre. ㅡ Acaricié su cabeza con tanta delicadeza, sintiendo que era el ser más frágil de este planeta. Quería cuidarla por el resto de mi vida.
Pero no me quedaba mucho tiempo.
Cantando hasta el final Esta canción podría ser interminable.
Desde que estuve en el hospital ha sido la persona que siempre me ha acompañado y no quería dejarla, no podía abandonarla.
ㅡ Hyunjin.ㅡ La llamé sosteniendo sus manos. Ella respondió haciendo un tierno ruido de afirmación. ㅡ Yo... Te quiero mucho.ㅡ
Se acercó con mucho cuidado abrazandome y por primera vez en mucho tiempo me sentí realmente feliz. Ella era mi cura.
ㅡ Lo sentimos, pero la hora de visitas ha acabado.ㅡ
🎚|#
Hyunjin llegó al suguiente día muy animada. Traía todo tipo de golosinas y regalos para ella.
Lo más importante era que iba a confesarle sus sentimientos a la chica de la que se había enamorado perdidamente.
Puedo sentir esa voz como un recuerdo...
Llegó demasiado tarde, ella ya no estaba.
No aguantó el dolor, fue aún más fuerte. Esta vez le ganó.
Dejó caer las bolsas de comida y el poema de amor.
Sus rodillas tocaron el suelo y las palmas de sus manos taparon su rostro.
Respira hondo.
Los doctores intentaban ayudarla. La noticia le había apuñalado hasta lo más profundo de su corazón, que había logrado sellar con su nombre.
Cantaré para ti, quién olvidó como llorar en voz alta.
Para que sigas adelante.
En el día en el que termine tu larga noche, estaré allí...
Cantaré por siempre contigo, mi amada. Cantaré hasta el final. Porque sé que aunque no me veas, estaré allí abrazandote y amandote. Dándote el amor que la vida me arrebató.
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Estaba escuchando a la diosa IU y me puse melancólica, asi que traigo un shot medio tristón