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En el club solo hay tres suites, el resto de los servicios se realizan en salas más pequeñas o en el nivel inferior del club, en sofás que están un poco más alejados del resto de los clientes en pequeñas cabinas.

Jimin baja las escaleras del balcón y camina hacia su suite, ubicada en un pasillo justo detrás de una puerta que está custodiada todo el tiempo por Yugyeom, uno de los miembros del personal de seguridad y amigo de Jungkook. Lo que significa que es un mocoso. Pero con músculos.

Yugyeom le abre la puerta, guiñándole un ojo mientras pasa junto a él, luego la puerta se cierra con llave y Jimin está en el pasillo. Pasa la suite roja y luego está frente a la puerta azul que conduce a la suya. Jimin respira hondo, se arregla un poco el cabello y luego abre la puerta.

Su suite siempre está teñida de azul.

Las luces de neón de color azul eléctrico son lo único que hace que las cosas sean visibles a los ojos, proyectando destellos azules en el sofá de cuero negro, haciendo que toda la habitación se sienta y parezca mucho más fría de lo que realmente es.

Jimin entra a la suite, cierra la puerta detrás de él y fija sus ojos en el vampiro sentado en el sofá. Es delgado, tal vez incluso un poco flacucho, la luz azul parece cavar agujeros en sus mejillas, su piel está pálida y está cubierta con ropa que parece demasiado grande para su cuerpo.

Jimin le sonríe, con una sutil curvatura en sus labios. "Primera vez aquí, ¿verdad cariño?"

El vampiro asiente. Su rostro es agradable, rasgos suaves y labios carnosos de color rosa pálido, nariz de botón pero ojos agudos y casi felinos. También conocido como: tipo de Jimin.

"Entonces déjame explicarte las reglas". Jimin comienza a desabrochar los primeros botones de su ya holgada camisa "Me reservaste por un minuto y medio, cuando se acabe el tiempo sonará una alarma y tendrás que parar. Sin embargo, puedes agregar minutos o segundos a la sesión, pero debes decírmelo antes de que se acabe el tiempo". El vampiro asiente, Jimin señala la esquina derecha de la habitación. "Hay una cámara allí, grabando todo en caso de que algo suceda. Además, puedo hacer sonar una alarma si por alguna razón no me siento cómodo o seguro". Jimin inclina la cabeza hacia un lado "¿Todo despejado?" Otro asentimiento. "Bien, entonces dime tu nombre".

El vampiro parpadea "Yoongi".

Es... bueno, no es el tipo de voz que Jimin esperaba de un rostro como ese. Es bajo, parecido incluso a un estruendo, profundo y jodidamente agradable de escuchar.

"Mi nombre es Jimin. Elige un lugar".

Yoongi frunce el ceño.

"¿Dónde quieres morderme?"

"Cuello." Responde sin perder el ritmo, sus ojos se posan en el cuello de Jimin por un segundo y luego de nuevo en su rostro.

A Jimin le parece bien que le muerdan el cuello, hay lugares mucho peores que alguien podría elegir. O tal vez tenga que ver con el hecho de que siempre le gustó tener marcas alrededor del cuello, hasta la clavícula, tal vez incluso más lejos, pero esa es otra historia y ahora está trabajando.

Jimin asiente y toma el cronómetro de la mesa de café frente al sofá, luego se sienta al lado de Yoongi, rozando las rodillas. Jimin baja la camisa de vestir hasta que cuelga justo debajo de sus hombros, dejando el cuello y las clavículas expuestos.

"Es nuevo, no quiero ensuciarlo". Jimin le da una sonrisa a Yoongi. "Hace tiempo que no me muerden el cuello, así que está todo limpio para ti".

"Suerte la mía." Yoongi dice y Jimin puede sentir una pizca de sarcasmo en su voz plana. "Tendré cuidado con tu camisa".