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Yoongi está sentado en la cama mientras Jimin se prepara para su último día de trabajo.

"¿Realmente tienes que irte?" pregunta, Jimin simplemente se abrocha la camisa.

"Sí."

"Mmm."

"Yoongi, es mi último día, déjame despedirme de todos y beber Martinis gratis".

"Esta bien, lo que sea." Yoongi chasquea la lengua. "Ah, es posible que no me encuentres cuando regreses. Tengo que reunirme con este cantante al amanecer porque es un aprendiz y tiene lecciones temprano, así que-"

"Está bien, supongo que me encontrarás durmiendo". Jimin se mira por última vez en el espejo. "Está bien, estoy listo para partir".

Se da vuelta y se inclina sobre Yoongi, besándolo rápidamente en los labios. Mientras se retira, Yoongi agarra su muñeca y lo empuja sobre la cama, luego se sube al regazo de Jimin y se tumba sobre él, olfateando su cuello y cabello, moviendo sus manos por toda su ropa.

"Errar." Jimin frunce el ceño mientras su novio sigue así, frotándose contra él "Yoongi, ¿qué-"

"Aquí." Yoongi de repente se aleja y se baja de él. "Ahora puedes irte".

"¿Qué fue eso?"

Yoongi se encoge de hombros "Nada, solo quería hacerlo".

"Eres tan jodidamente raro".

...

"Está bien, mira, realmente me gusta este Bambam, es muy gracioso". Taehyung le dice mientras se sientan en el balcón: "Pero la última vez que lo vi, me dijo adiós".

Jimin parpadea "Espera, ¿qué?"

"Sí, la gente te dice adiós con la mano, pero él no, oh no. Se despide con un toquecito". Taehyung niega con la cabeza "Es un genio".

Jimin se ríe. "De todos modos, ¿dónde diablos está Jin-hyung? Quería charlar con él pero ni siquiera está aquí".

Taehyung mueve las cejas "Namjoon-hyung tampoco está aquí, ¿sabes lo que eso significa?"

"Oh Dios."

"Arco Chika Bow Wow".

Jimin resopla, casi ahogándose con su Martini, Taehyung luciendo demasiado engreído y satisfecho con su estúpida broma.

Tal vez realmente extrañe este lugar. Extrañará este balcón, los Martinis, matar el tiempo con Taehyung, extrañará la melodía del Hip Hop lofi que llena el burdel, los sofás ridículamente caros, las velas encendidas por todas partes, en todas las superficies.

Pero entonces es cuando se da cuenta de que casi todos los clientes del burdel lo están mirando. No es que tengan hambre, más bien... como si estuvieran asombrados. Casi asustado de acercarse a él, mirando a Jimin como si no debería estar aquí, como si no perteneciera.

Ahí es también cuando Jungkook básicamente corre bajo el balcón, mirándolo con la misma mirada.

"Hyung, ¿qué carajo?"

"¿Qué?" Jimin frunce el ceño "¿Qué pasa? ¿Por qué todos me miran?"

"¡Tú-los estás asustando! ¡Ni siquiera pueden acercarse a ti!

"No-"

"Estás marcado, así que ¿por qué siquiera-?"

"Vaya, espera". Jimin levanta la mano "¿Qué quieres decir con marcado?"

Jungkook parpadea. "Hyung, estás empapado con el olor de un vampiro. ¿Supongo que Yoongi? Él te marcó".

"Me marcó".