Síndrome de Estocolmo/Larry stylinson

Louis, el chico de la sonrisa rota.

Todo se complicó 4 meses después de que liberaran a Harry E. Styles y la policía diera orden de buscar por cielo mar y tierra a Troy Austin y Johannah Poulston, quienes habían sido responsables del secuestro. Un amigo de ambos se encargó de ayudarlos o más bien de terminarlos de chingar, subiéndolos a un helicóptero privado que los llevaría a Colombia, allá les esperaría un nuevo trabajo, una nueva vida como mencionaba Leeroy Bustamante, el mismo que personalmente los subió al helicóptero que los trasladaría hacia un nuevo futuro.

-¡El chamaco no va!- Menciono Leeroy tomando a Louis del brazo para evitar que subiera. –Es un peligro, al niño nadie lo está buscando, si no a ustedes, si quieren que el chamaco este a salvo déjenlo aquí, aquí se lo cuidamos hasta que cumpla 18 y se reencuentre con ustedes.
-¿Pero cómo?, él no se puede quedar es mi hijo, ¿Qué voy a hacer sin el?- Menciono Johannah angustiada por la difícil decisión, -Si el no va, yo tampoco yo me quedo a probar suerte mexicana.
-Amor, deja al chamaco, el estará bien, conozco al Sr. Bustamante y es un hombre de palabra, en Colombia tendremos una vida mejor que darle, ¿No quieres que cuando el cumpla 18, este orgulloso de nosotros, cuando llegue a Colombia y nos vea en una mansión con sirvientas, un jardín grande como un estadio de soccer, alberca y muchos lujos que aquí jamás tendremos?, ¿Quieres vivir escondida por siempre?- Sube amor, vamos a platicarlo y si no te gusta la idea, nos quedamos los 3, ¿de acuerdo?-. Troy hizo una seña al señor Bustamante y este se metió a un pequeño cuarto con el niño
-¡Aquí te vas a hacer un hombre, chamaco! – Bustamante jalaba con fuerza a Lou, mientras se escuchaba el sonido de las hélices girando del Helicóptero, Louis volteo, y vio que el Helicóptero se elevaba.
-¡Mamá, Papá! – Louis grito tratando de zafarse de las manos del señor Bustamante que lastimaban el brazo del pequeño, Jalo con todas sus fuerzas para salir corriendo como si eso detuviera el helicóptero.- Tranquilízate chamaco.- Bustamante exclamaba, mientras apretaba más al brazo del menor, Louis desesperado mordió la mano de Bustamante y corrió, pero no tardo nada en que el señor Bustamante volviera a agarrarlo de uno de los tirantes que llevaba puesto Louis.- ¡Te dije que te tranquilices! .- Bustamante le dio una fuerte bofetada, Louis perdió completamente el equilibrio y cayó al suelo(…)

Louis ya llevaba 4 años con Bustamante y su gente, su inocencia se había perdido por completo, desde que llego a los 12 años hasta los 16 que había cumplido hace 2 días, Louis había aprendido como usar un arma de fuego, cuchillos, como manejar un auto, incluso había aprendido a robar, su carita era un excelente distractor para que nadie sospechara de él, su corazón estaba completamente destrozado, a sus 16 años, su vida estaba completamente destruida, ya no sonreía y sus ojos no mostraban ningún tipo de luz, pasaba todo el tiempo serio en un cuarto con poca luz, viendo su navaja, una navaja que su amigo Juan que tenía una historia similar a la de él, le regalo.
-Hoy es tu día de suerte mi Louis- Menciono Juan, amigo de Louis, con 20 años cumplidos, mismos 20 años que había pasado con Bustamante.- Hoy hay putas, vas a pasar de ser un chamaco de 16 años a ser un hombrecito de 16 años.
-¿Qué dices?.- Louis ladeo la cabeza para ver de que hablaba Juan.
-Que hoy vamos al “Teibol”,  y no solo eso, hoy te estrenas con una vieja, es lo menos que puedo hacer por mi colega Louis Tomlinson.

Louis como en todo, si no aceptaba iba a ser obligado a hacerlo, él sabía que la idea no era de Juan, si no de Bustamante, así que acepto de inmediato, pero Louis tenía unos planes en mente para esa noche que no debían fallar.

Al llegar a aquel sitio, había un hombre rudo vestido de negro en la puerta, Juan le mostro una credencial y sin decir nada los dejo pasar, al entrar la música comenzaba a sonar cada vez más alto a medida de que se acercaban, decidieron sentarse en un gran sofá rojo frente al sitio donde las mujeres bailaban con poca ropa, Una chica rubia se sentó junto a ellos y acariciaba la pierna de Louis.
-¡Hola Guapo!.- Menciono aquella mujer mientras su mano lentamente subia a la entre pierna de Louis.
-¡Hey, Hey!, Quiero a la mujer más joven que tengas, es un niño de 16 años apenas que hoy probara las delicias de la vida.- Dijo Juan sonriendo a aquella mujer que intentaba estimular a Louis.