el príncipe y la plebeya [C A N C E L A D A]

2

apenas llegó a su hogar, con el muchacho en su espalda su abuela quien tenía un balde de agua fue donde ella y le preguntó quién era el muchacho, alterada ya que veia la ropa de este toda ensangrentada. 

-no lo se pero tenemos que curarlo y rápido- dijo para luego ir con su abuela dentro de la casa, fueron rápidamente a una habitación, especificando la habitación de la chica 

-mi niña iré por las vendas, te dejo este balde de agua- dijo la mujer mayor dejando el balde de madera que tenía agua

-si- la mujer salió del cuarto y la chica quito el ropaje de arriba del muchacho contemplando la herida que este tenía, empezó a limpiar la herida con el agua y un trapo. Se quedaba viendo las heridas mientras las limpiaba, no eran muy profundas pero si eran peligrosas ya que si el chico se movía mucho podría volver a desangrarse. 

la mujer mayor llegó con las vendas y empezaron a vendarle por la parte del pecho cuando lo terminaron de vendar, le pusieron una camisa limpia y lo dejaron descansar. 

como la pequeña casa no era de dos pisos, los cuartos eran compartidos menos el de la inca, ya que al ser mujer la separaron de habitación de los demás ya que ella era la única mujer además de su abuela en esa casa. 

-2 horas después- 

Narra. Urss 

desperté en una habitación, lo único que recuerdo era de que estaba con mi caballo y unos guardias, luego que nos habían atacado, intente moverme pero vi que tenia otra ropa y un punzón en mi pecho.

-hasta que despiertas- escuche una voz, voltee a ver y vi a una muchacha de cabello...multicolor?!, morena, como si fuera leche achocolatada, una polera y una falda larga. Ella llevaba un plato en manos. 

-...- no dije nada y solo volví a mirar al techo, vi que se acercó a la cama

-bien como no te puedes mover déjame darte comida- dijo la chica 

Narra. Yo 

antes de que la chica le diera una cucharada, él con su mano la tiró.

-p-pero, QUÉ TE SUCEDE?!- dijo molesta por el movimiento de el muchacho 

-no tengo hambre...- dijo el chico con una expresión seria 

-pero necesitas comer si quieres sanar esas heridas! -volvió a decir persistente mientras señalaba la parte vendada 

-no necesito tu ayuda- dijo el chico mirándola con el ceño fruncido 

-ah con que no necesitas mi ayuda, si no fuera por mi estarías DESANGRANDOTE EN PLENO CAMPO- dijo enojada 

-...- solo se quedo callado viendo las facciones enojadas de la chica, le parecía interesante. 

-bien si no vas a comer con mi ayuda, come solo -dijo la chica dejando el plato en la mesita de noche para luego irse enojada del cuarto

el solo pudo ver como ella se fue, empezó a sentarse en la cama con mucho cuidado apoyándose de la pared que estaba detrás de él agarró el plato de comida junto a una cuchara limpia, empezando a comer por su cuenta, la comida tenía un toque delicioso, que empezó a dar cucharadas más grandes hasta que se terminó toda la comida. 

-no... estaba... mal- dijo serio dejando el plato en la mesa de noche volvió a echarse en la cómoda cama. 

Miraba la habitación con detenimiento, no habían muchas cosas femeninas, pero si habían algunas faldas en una silla dobladas. Hasta que todo se torno oscuro, había cerrado sus ojos. 

-6 horas más tarde- 

algo interrumpió su sueño, su mirada se detuvo en la ventana cerca de la cama y vio a alguien en una silla afuera, mirando a la luna con una guitarra en manos mientras tocaba unas suaves melodías. Que lo relajaron, volviendo a dormirse sin antes mirar a esa figura otra vez. 

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escrito: 03/10/20