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Una tarde de invierno Harry y Louis caminaban por una calle fría de Londres con rumbo a su cafetería favorita Ralph's Coffee, festejaban el nuevo trabajo de Harry como un importante editor de la revista más famosa de Reino Unido.
Ambos estaban felices de poder festejar otro logro juntos, ya que desde los 6 años de Harry y 8 años de Louis han festejado cada una de las buenas noticias que han recibido; aunque también han estado juntos en los malos momentos.
Ellos han tenido sentimiento el uno por el otro desde que Louis cumplió 18 años y Harry lo supo desde que él tenía 16 pero son incapaces de confesar sus sentimientos que van más allá de una amistad por tener miedo a no ser correspondidos, además Louis -apodo que ha utilizado Harry desde los seis años - tiene miedo de la reacción que podría tener su estricto padre Simon.
-Hazza- dijo Louis para llamar la atención de su amigo Harry, el aludido levantó la mirada y le ofreció una cálida sonrisa a Louis -¿Qué pasaría con nuestra amistad si tuviera que irme de Londres por un largo tiempo?- Harry lo miró reflejando una inmensa sorpresa en sus ojos -¿A qué llamas un largo tiempo?- Se quedó pensando Louis en el tiempo que su padre al enterarse de su secreto, lo enviaría a conseguir un nuevo trabajo lejos de Harry -Tal vez estamos hablando de dos o tres años-Harry suspiro antes de contestar y quedándose con la mirada fija en su café le respondió-No voy a mentir que te extrañaría mucho pero no me debería preocupar ya que tienes un trabajo en la empresa de tu papá, así que no veo el motivo por el que te quieres mudar-Louis simplemente le devolvió la sonrisa a Harry tratando de ocultar la verdadera razón de su pregunta ya que él tenía planes de confesarle a su padre el hecho de que ama a Harry, después de un eterno silencio cambiaron de tema, riendo y olvidando el tema por el cual ambos es secreto estaban sufriendo.
Era de noche cuando ambos salieron de Ralph's Coffee se despidieron como generalmente lo hacían pero en ese momento Louis lo único que quería era quedarse un rato más o mínimo no volver a casa tan pronto; ya que el hecho de enfrentar a su padre Simon le causaba ansiedad y por un momento le pasó por su mente pedirle a Harry quedarse un tiempo más en la cafetería, pero desechó su plan cuando Harry confesó que estaba agotado por el largo día que había tenido; por lo cual a Louis no le quedó de otra que volver a casa.
