un delicado rostro amargo

2 1 0
                                    

No puedo dejar de observar su rostro pálido, delicado y hermoso que seencuentra recostado en el almohadón, pacifica e inocente criatura humana; sucabello es brillante, sedoso, largo y de un tono gris plata. Es evidente quedeseo a esa mujer, sin embargo, me limito a observarla cada noche. A medida quepasa el tiempo, periodo el cual, a mi parecer me resulta ser sumamente efímero,me pierdo observando pacientemente cada fibra de su cabello, cada tejido de sucuerpo...

cosasquenoimportanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora